El sorteo del Mundial, un trabajo fino

El sorteo de Zurich para el Mundial-82 ha resultado un trabajo fino. Prácticamente todas las grandes selecciones obtendrán su clasificación. Ha resultado tan favorable para el Comité Organizador -de cara al espectáculo y a los ingresos-, que más parece un sorteo manejad o desde un despacho madrileño. Las bolas han salido tan satisfactoriamente como si se hubiesen extraído bolas frías y calientes, que es como, dicen, se lograban enfrentamientos eurocoperos ante chipriotas, malteses e islandeses. Que es como estc año, supongo que por pura casualidad, le ha ocurrido al Barça en la Recopa.

El sorteo de los grupos europeos es previsible que nos traiga a España a estos participantes: Alemania Federal, Austria, Holanda, Francia (o Bélgica), Checoslovaquia, URSS, Italia, Yugoslavia, Escocia, Portugal (Suecia) y Polonia, por parte europea. De América, además de Argentina, clasificada de oficio como España, parece claro que lleguen Brasil, México, Uruguay y Paraguay (o Chile). El resto de participantes pertenece al folklore, aunque por vez primera nos podemos encontrar con la presencia de China Popular en un Mundial.El sorteo ha dado unos resultados muy equilibrados. Están todos los grupos orientados hacia que ganen los mejores. Pocas selecciones de primer rango quedarán fuera. Y si tal ocurre será porque alguna estropea los pronósticos. Los señores de la FIFA, con la fórmula española, es decir, veinticuatro selecciones, han tratado de potenciar el campeonato. Ya no hay excusa para que esté Tunez y no Inglaterra. Podría suceder que a los ingleses les eliminasen y que Túnez, que pertenece a otra área, repitiera el éxito del pasado Mundial, pero sobre el papel en España estarán todos los grandes, y los folklóricos se limitarán a ser el acompañamiento.

Los señores de la FIFA no se han inmutado ante la ausencia de Saporta. Para ellos, aquí no pasa nada. Havelange, por si acaso, ha anunciado su visita a fin de ver sobre el terreno qué es lo que sucede. Para entonces ya tendremos nuevo presidente.

Según Pablo Porta, corresponde a la Federación proponer al Consejo de Deportes, para que éste a su vez lo traslade al Ministerio de Cultura, el nombre del futuro presidente. Lo reglamentario y lo cortés es así, pero podría suceder que a la vista de lo complicada de la cuestión el nombre saliera del Gobierno para que Porta lo hiciera suyo y, a partir de aquí, se siguiera el trámite reglamentario.

El primer nombre en sonar ha sido el de Luis Cazorla. Cazorla fue lanzador de martillo, es abogado del Estado, forma parte del Comité Organizador en representación del Ministerio de Hacienda, a cuyo gabinete técnico pertenece en la actualidad. Cazorla estaría bien visto por el PSOE, pero encontraría alguna oposición en el Consejo Superior de Deportes. Otro nombre a tener en cuenta es el de Angel Marló Carreño Rodríguez-Maribona, director general del Instituto Nacional de la Vivienda, miembro del Comité Organizador en representación de Obras Públicas.

Alguien ha lanzado ya el nombre de Pablo Porta, éste no se afligiría ante los problemas políticos, pero no parece probable una dualidad de cargos. También a última hora se especula con Juan Antonio Samaranch, pero tampoco parece muy probable su nombramiento, porque ello le supondría abandonar Moscú, en donde se está ganando con los próximos Juegos Olímpicos la presidencia del Comité Olímpico Internacional.

Esta semana recibirá Clavero a Porta y se pondrá en marcha el mecanismo de la sucesión. La gente del fútbol espera ahora ansiosa. Un político a secas parece que les disgustaría.