Incautados tres alijos de hachís valorados en noventa millones

Tres alijos de hachís, con un peso total de 273 kilos y un valor aproximado de noventa millones de pesetas, según los precios que alcanza en el mercado, han sido aprehendidos durante los últimos días por inspectores madrileños de la Brigada de Estupefacientes, en colaboración con funcionarios de la Costa del Sol y de Galicia. Entre las personas detenidas como consecuencia de estas operaciones figura un cabo primero de la Guardia Civil

La detención del miembro de la Guardia Civil se produjo el pasado lunes en Madrid, según una información publicada en el periódico Faro de Vigo y recogida por la agencia Europa Press. Según estas fuentes, la detención se produjo cuando el cabo primero y otra persona, también gallega, viajaban en un automóvil en cuyo interior se encontraba un maletín, con una importante cantidad de la citada droga.El cabo primero, cuya identidad no ha sido facilitada, disfrutaba en el momento de su detención de un permiso reglamentario. Se desconoce por el momento el grado de implicación en los hechos. Tras la declaración prestada en comisaría fue trasladado a la Dirección General de la Guardia Civil. La detención de estas dos personas parece relacionada con una amplia operación iniciada en Galicia.

Como resultado de esta actuación policial, el pasado día 5 la policía madrileña detuvo a Jesús Jaime Domínguez, de veinticinco años, nacido en Orense, y a Plácido Pereira, de 38 años, natural de Lugo, como presuntos autores de tráfico de drogas. En total se les han intervenido 75 kilos de hachís prensado. El alijo estaba formado por 272 tabletas distribuidas en bloques de ochenta unidades recubiertas con plástico y envueltas en papel tipo cello.

Según información de la policía, toda la mercancía procedía de Málaga y los detenidos intentaban introducirla en Galicia. Tras varios días de vigilancia policial en los accesos de Madrid, la detención se produjo en la carretera de Andalucía.

Además de los 75 kilos de hachís, la policía les ha incautado el turismo en el que portaban la droga, un Seat 132 matrícula M-3709-DD, de color blanco, 54.000 pesetas, una calculadora de bolsillo y otros objetos. En el maletero del coche tenían envases de conocidas marcas de alimentos, en cuyo interior llevaban hachís compacto.

El quinto detenido por supuesto tráfico de hachís es Alfonso Cerdeiriña, de veintiséis años, que intentaba distribuir en Madrid cincuenta tabletas de hachís, con un peso total de trece kilos.

En otra operación policial llevada a cabo también en Madrid, en colaboración con inspectores de la Costa del Sol, ha sido descubierto un depósito de 185 kilos de hachís, dispuestos en tres lotes diferentes.

El hallazgo fue realizado en un piso de Madrid que figuraba a nombre de uno de los siete súbditos marroquíes detenidos días atrás en Marbella bajo la acusación de que se dedicaban ar tráfico de drogas. También han sido intervenidos un automóvil Mercedes y numerosos televisores, radios y magnetófonos que, al parecer, habían sido introducidos en España por vía marítima, al igual que las drogas.

Durante las últimas semanas se ha podido apreciar en la calle el aumento de redadas policiales, en puntos conocidos por reunirse en ellos gente joven y en los que traficantes de drogas, en general blandas, intentan introducir su mercancía. La forma en que se realizan estas redadas ha variado notablemente, respecto a como tradicionalmente se venían haciendo. La policía, en lugar de llegar en sus coches haciendo oír las sirenas, se dirige en grupos numerosos y a pie por los puntos en los que puede haber gente vendiendo cualquier sustancia estupefaciente o que simplemente está fumándose un porro. Durante estas redadas, la policía también pide la identificación a toda persona cuyo aspecto le pueda resultar sospechoso