El PSOE rompe el pacto municipal con el PCE en San Sebastián de los Reyes
El pacto PSOE-PCE, suscrito en San Sebastián de los Reyes tras las elecciones municipales del mes de abril, fue roto ayer por los concejales socialistas, según acordaron éstos al término de una reunión celebrada en el Ayuntamiento. La decisión culmina un proceso de enfrentamientos por temas municipales que incluso motivaron, a finales de septiembre, la imposición de una multa de 500.000 pesetas a un concejal comunista por agredir supuestamente al alcalde socialista con un megáfono. A pesar de la ruptura del pacto, el PSOE no pierde la mayoría municipal, al tener once de los veintiún concejales que componen la Corporación, mientras el PCE tiene cinco, UCD tiene cuatro, y PTE cuenta con uno.
El alcalde de la localidad madrileña, Adolfo Conde, hizo público ayer un comunicado en el que se anuncia la finalización del pacto entre concejales socialistas y comunistas por considerar que, de esta forma, saldrán beneficiados los ciudadanos. En el escrito, entregado a la agencia Efe, los socialistas «lamentan comunicar al pueblo y a la opinión pública esta decisión», al tiempo que dicen que las razones de esta postura se deben a las reiteradas muestras de obstruccionismo de los concejales comunistas y, en particular, a Luis Gallego, concejal comunista que fue multado por el gobernador civil con medio millón de pesetas a raíz de los sucesos ocurridos el 2-4 de septiembre en el colegio Silvio Abad, en los que resultó golpeado el alcalde.Fuera golpeado casualmente, según la versión del concejal, o a propósito, según una nota difundida por el alcalde (véase EL PAÍS de 2 de octubre), lo cierto es que los problemas entre ambos partidos se precipitaron a raíz del suceso.
Incidentes y acusaciones mutuas
«El incidente por el que fui multado es un eslabón más en el camino de la ruptura de los socialistas. Nunca existió el pacto para ellos, ya que son mayoría y no necesitan nuestra ayuda. Desde el principio hubo dificultades, tanto para la distribución de responsabilidades como en los objetivos municipales que había que abordar», manifestó en la tarde de ayer Luis Gallego, a quien, de una forma oficial, no se le había comunicado la ruptura.
Según la nota de los concejales socialistas, «los comunistas han demostrado con su actuación su deseo de no colaborar con nosotros en la solución de los problemas vecinales y han roto ellos mismos el acuerdo marco». Sobre este punto, el señor Gallego manifestó que los cinco concejales comunistas se habían opuesto a varios proyectos socialistas, «como la creación de piscinas o como la construcción de una pista deportiva, de la que se trató el pasado viernes en la comisión de Hacienda. Nosotros hemos venido reclamando desde abril un plan de acción municipal, unos cauces para la participación ciudadana, y otros puntos que no tienen nada que ver con las actuaciones abstractas que se han querido abordar».
Estas oposiciones a proyectos del PSOE, unido principalmente a que «nunca los concejales socialistas han trabajado en colaboración con nosotros», según explicó el portavoz comunista, motivó que encargados de política municipal del PCE y del PSOE mantuvieran en los últimos meses reuniones para tratar de localidades en donde el pacto, como en el caso de San Sebastián de los Reyes, corría peligro.
Estas conversaciones, referidas al caso concreto de la población madrileña, no parecen haber obtenido éxito. Mientras los concejales socialistas piensan que con el fin del pacto salen beneficiados los vecinos «porque a partir de ahora se agilizarán los trámites municipales que, por su culpa, se habían paralizado», los comunistas dicen que seguirán trabajando en el Ayuntamiento «en una posición constructiva, ya que como de hecho nunca ha existido pacto, no va a pasar nada».
Ambos grupos restan importancia al asunto
Para la próxima semana se espera que haya una reunión entre los miembros de la Corporación, pertenecientes al PSOE y al PCE, con el fin de que los primeros anuncien oficialmente su decisión y se establezcan las líneas que a partir de ahora van a seguir estos partidos en sus relaciones mutuas. «La ruptura parece definitiva, ya que así lo demuestra la decisión unilateral del PSOE. Además, no creo que quieran establecer una plataforma de colaboración. Por nuestra parte, esperamos que los proyectos que presentemos a partir de ahora, como ese plan de acción municipal que queremos llevar a pleno, cuenten con el apoyo socialista en los puntos comunes. Lo que desde luego no vamos a hacer es meternos en dialécticas que paralicen la gestión municipal.»
Si la decisión socialista no parece suponer una variación en las relaciones que ambos partidos de izquierda tenían a nivel local, dirigentes del PCE, como Ramón Tamames, informaron sobre este tema que el caso «no va a tener ninguna proyección exterior, ya que es un caso particular».
