Las drogas también dividen a los concejales
La discusión en torno a si las drogas blandas deben ser legalizadas o no ocupó el centro del turno de ruegos y preguntas del pleno ordinario que, aplazado desde la semana pasada, celebró ayer el Ayuntamiento. El motivo de que surgiera tal discusión, tan alejada de los temas puramente municipales, estaba en unas declaraciones realizadas por el concejal socialista Esteban Díaz Maroto -ayer, por cierto, nombrado presidente de una comisión de estudio de la problemática juvenil-, en las que se mostraba partidario de la legalización de las drogas blandas, es decir, del conocido porro.La respuesta a esas declaraciones vino por parte del concejal de UCD Luis Peral, quien mostró su discrepancia y asombro por las declaraciones citadas y aseguró que «las drogas blandas son un primer paso para llegar a las drogas duras».
Esteban Díaz Maroto contestó asegurando que conocía muy bien la problemática que presentan las drogas y que lo que había que hacer era quitarle el halo paternalista y represor en torno a ellas y abordar y estudiar seriamente el problema.
Por parte comunista intervino el concejal responsable de Sanidad Municipal, Juan Francisco Pla, quien basó su razonamiento en que otras drogas, como el tabaco y el alcohol, no sólo están permitidas, sino incluso potenciadas a través de la publicidad televisiva.
La afirmación más tajante vino por parte del segundo teniente de alcalde, el socialista Alonso Puerta, quien, tras abundar en los razonamientos del señor Pla, llegó a asegurar que «el PSOE está a favor de la legalización de las drogas blandas» y «tendríamos que felicitarnos todos por las declaraciones del compañero Díaz Maroto». José Luis Álvarez, por UCD, se negó a «esa felicitación» y mostró su sorpresa por la afirmación del señor Puerta.
En el orden del día previo, la Corporación aprobó las primeras modificaciones de las ordenanzas fiscales y la composición de una comisión para estudiar la municipalización de los servicios de los mercados centrales.
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