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Suárez intervino directamente en la neutralización de la huelga de Asturias

Un equipo de grúas inició en la mañana de ayer la retirada de los camiones aparcados en los arcenes de las carreteras asturianas, algunos de los cuales han comenzado a ser requisados para su utilización en el abastecimiento de la provincia. El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, ha tenido una intervención directa, según pudo saber EL PAIS en fuentes competentes, en la decisión de poner en marcha el enérgico plan de emergencia, del que sólo se conoce la primera fase, y que podría incluir la militarización del sector.

Pese a la recomendación de la Federación Asturiana de Empresarios de reconsiderar el acuerdo del cierre empresarial, tomado hace tres días como consecuencia de la paralización del proceso productivo por la huelga del transporte, fueron presentados 194 expedientes de cierre.El gobernador civil de la provincia manifestó ayer que la huelga responde a móviles políticos y que con ella se ha pretendido estrangular la región por sus arterias en un intento desestabilizador. En su opinión, una huelga como esta no se mantiene sin un importante apoyo económico. «Además», agregó, «está claro que el recrudecimiento del conflicto obedece a la imposición de una minoría. Hubo coacciones violentas en las asambleas, en las que no ha destacado precisamente el comportamiento democrático.»

El señor Martín Caballero afirmó que por parte de la Administración la negociación se encontraba zanjada al no comparecer el comité de paro. «En realidad», añadió, «quienes tienen que negociar son los transportistas y las empresas a las que prestan sus servicios. Yo no entro a juzgar las reivindicaciones de los transportistas autopatronos, algunas de las cuales pueden ser razonables. Mi papel, a partir del momento en que la Administración se retira de la negociación a la que había acudido ante la solicitud del organismo preautonómico, es el de mantener las constantes vitales de la región con los medios que la ley pone a mi alcance.»

La detención del sacerdote José Manuel Bárcena, hermano del presidente de Cesintra, asociación convocante de la huelga, ha sido justificado por el gobernador civil invocando el apartado primero de un comunicado hecho público ayer en el que se advertía que serían detenidos quienes efectúen llamamientos, incitaciones o suberencias a la violencia para mantener el conflicto y quienes sean sorprendidos formando parte de piquetes.

La UGT y el PSOE -partido en el que milita Alejandro Bárcena, presidente de Cesintra, quien ha conseguido eludir a la policía, que le busca para su detención- han emitido un comunicado en el que pide la inmediata desconvocatoria de la huelga y la apertura de unas negociaciones fuera de un marco coactivo.

Asetra, asociación que engloba a los grandes empresarios del transporte, pero cuya influencia en el desarrollo de la huelga es muy escasa, ha recomendado a sus asociados volver a la normalidad.

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