Mejora el clima en las negociaciones para el convenio de gasolineras

Las negociaciones para la firma de un nuevo convenio nacional de estaciones de servicio privadas han entrado en una nueva fase al llegar las partes a un acuerdo según el cual serán discutidos en primer lugar los puntos no económicos del convenio, soslayando así el punto muerto en que se había entrado como consecuencia de la negativa patronal a considerar incrementos salariales superiores al 11%.

Las partes patronal y sindical del sector de estaciones de servicio volvieron a reunirse ayer, en rondas de mañana y tarde, tras varias jornadas de estancamiento. Los empresarios presentaron una propuesta para que la autoridad laboral dictara un laudo de obligado cumplimiento referido exclusivamente a los aspectos de revisión salarial del convenio, pasando a negociar los restantes aspectos de la plataforma reivindicativa presentada por los trabajadores. Esta pretensión de la patronal fue rechazada por los trabajadores y también por el representante del Ministerio de Trabajo designado para presidir las deliberaciones.Tras el intento empresarial de ir al laudo, las partes llegaron al acuerdo de discutir en primer término los temas no salariales del convenio, dejando éstos para el final de las negociaciones. Este acuerdo supone, en cierta medida, soslayar el punto muerto en que se encontraban las negociaciones desde la huelga desarrollada en los primeros días de la pasada semana, que encontró escaso eco en el sector. En la reunión de la tarde, ambas partes iniciaron la discusión de los temas sindicales contenidos en la tabla reivindicativa de los trabajadores, aunque sin que se alcanzaran acuerdos concretos. Para hoy está prevista la continuación de las conversaciones.

Fuentes de los negociadores sindicales del convenio denunciaron ayer la insistencia de la patronal en utilizar a los trabajadores como elemento de presión para alcanzar la revisión de las comisiones que perciben de CAMPSA por la venta de productos derivados del petróleo. Desde el inicio de las conversaciones, los empresarios han insistido reiteradamente en que sólo estarían dispuestos a otorgar alzas salariales superiores al 11% en la medida en que el monopolio autorizara incrementos en las comisiones percibidas por los empresarios del sector. La revisión de las comisiones deberá estipularse a partir del próximo día 1 de noviembre, fecha en la que expiran los montos acordados el pasado año. Con ocasión de la huelga del sector de la pasada semana, la patronal de estaciones de servicio y CAMPSA difundieron notas contradictorias sobre un supuesto acuerdo relativo a la revisión de comisiones. Dicho acuerdo fue establecido, al parecer, entre los técnicos comerciales de CAMPSA y la patronal de estaciones de servicio, como recomendación de base para variar el esquema de las comisiones, pero no ha sido todavía ni siquiera considerado por la dirección de CAMPSA. Los empresarios, sin embargo, manifestaron públicamente que el actual subsecretario de Hacienda había vetado la aplicación de dicho acuerdo, en cuya negociación previa había participado como delegado del Gobierno en la Compañía Arrendataria, cargo que ocupó hasta su paso a la Administración.

Las comisiones que vienen percibiendo los empresarios de estaciones de servicio fueron acordadas el pasado año, superando las cifras elaboradas por los servicios técnicos de CAMPSA. Las negociaciones fueron en aquella oportunidad muy tensas, especialmente por las discrepancias entre ambas partes sobre los incrementos de costes y las plantillas del sector. Los cálculos de incrementos de consumo y alza de las comisiones evidencian un incremento de los ingresos globales del sector de unos 6.500 millones de pesetas durante el período desde el 1 de noviembre de 1978 al mismo día del presente año. Esta cifra global, se disminuye muy irregularmente.