_
_
_
_
GENTE

Alvaro Domecq y Díez,

rejoneador retirado y ganadero de reses bravas, ha resultado herido con una cornada de catorce centímetros de extensión cuando preparaba un caballo para el rejoneo y se entrenaba frente a un carretón en su finca jerezana. El carretón, aparato que posee una cornamenta, era conducido por una nieta del herido.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_