El Partido Comunista y el Partido de Acción Nacional se disputan el segundo puesto

En el marco de una encuesta sobre actitudes electorales realizada en México por la Dirección de Investigaciones Políticas, de la Secretaría de Gobernación, se afirma como lo más significativo «advertir que el Partido Comunista Mexicano (PCM) ha alcanzado y rebasado al Partido Acción Nacional (PAN) en lo que se refiere al conocimiento de sus candidatos».El estudio, practicado en los cuarenta distritos en que está dividida electoralmente la ciudad de México, señala que la contienda de hoy en las urnas «parece haberse convertido en una pugna triangular entre PRI, PAN y PCM». Por su parte, el texto indica que los candidatos del partido oficial aventajan a los de la oposición «en todos los aspectos».

¿Cuáles son esos aspectos? El análisis, efectuado entre 1.629 personas, afirma que el 64% de los entrevistados manifestó su apoyo al PRI; el 16%, al PAN, y el 11%, al PCM. Finalmente, el 2% dijo que votará por el Partido Demócrata Mexicano (PDM), y otro tanto por el Partido Socialista de los Trabajadores (PST).

Por otro lado, este muestreo revela que la apatía política se manifiesta en la asistencia a actos electorales: 1.078 personas admitieron no haber asistido a ningún mitin, y sólo 296 se desplazaron a un acto de partido. Según estas cifras de Gobernación, la mitad de los encuestados que darán su voto al PCM son estudiantes jóvenes.

Para ejemplificar la caída del PAN -distintiva trinchera de la derecha pro empresarial- el cuestionarlo informa que sólo diecisiete personas de las que afirmaron votar por este partido concurrieron a actos políticos «y apenas cuatro conocen el nombre de su candidato».

Estas estimaciones fueron reforzadas por otras que efectuó, durante la presente semana, el propio Partido Revolucionario Institucional (PRI). Así, sus analistas dijeron que, según sus cálculos, votarán aproximadamente 19 millones 500 mil personas; es decir, alrededor del 70% del electorado. Y dentro de ese porcentaje, esperan que el 61,8% ponga en las urnas las papeletas del PRI. Estas esperanzas se encuentran avaladas, según este partido, por un gigantesco aparato político, el cual movilizó en los noventa días de campaña unos 32 mil brigadistas jóvenes.

Y que corone algo más: el hecho de constituir el PRI como el partido oficial, de llevar tras sí el peso del control del Estado y de ser el hábito y la tradición política más profunda de los mexicanos. Sus actos políticos, en muchos casos, estuvieron rodeados de viejos trucos electorales, como el reparto de leche (en un solo mitin llegaron a repartirse 15 mil litros), y también de pan, pollos asados, juguetes y artículos deportivos.

Todos los analistas coinciden en evaluar como la novedad más interesante del acto que tendrá lugar hoy la presencia del Partido Comunista Mexicano. Sus dirigentes son prudentes en sus afirmaciones, al tiempo que declaran que toda la campana, en su conjunto, les costó unos 3 millones de pesos (120 mil dólares, aproximadamente). En general, las banderas programáticas de los partidos de izquierda coincidieron en muchos puntos. Por ejemplo, en la necesidad de que las autoridades del distrito federal sean electas y no designadas por el presidente, en la municipalización del transporte de la capital, en la nacionalización de distintas industrias. Las direcciones del PCM y del PST, además, han asegurado que sus demandas en la Cámara de Diputados se acompañarán «con acciones en la calle». Lo cierto es que estos partidos -cuya fuerza política real se verá el domingo- han otorgado a esta campaña, por lo menos, un estilo más combativo y de denuncia.