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Muzorewa, virtual primer ministro de Rodesia, pide el reconocimiento de su régimen

Hablando en Salisbury como primer ministro in pectore del futuro Gobierno rodesiano de mayoría negra, el obispo Muzorewa ha pedido formalmente el reconocimiento internacional del nuevo régimen y el fin de las sanciones económicas que pesan sobre su país.

Con el 67% de los votos válidos en las recientes elecciones de cinco días, el partido de Abel Muzorewa, Congreso Nacional Africano Unido (UANC), ha obtenido 51 de los 72 escaños reservados a los africanos en el nuevo Parlamento de cien asientos. Los restantes veintiocho escaños estarán bajo el control del líder blanco lan Smith y, con ellos, el poder para bloquear cualquier cambio constitucional que perjudique los intereses de la minoría europea.El obispo Muzorewa dispondrá de diezcarteras en el Gabinete, que probablemente tomará posesión en junio. El Frente Rodesiano del señor Smith tendrá cinco y dos ca da uno de los otros dos partidos negros que han obtenido escaños en las elecciones. Nbadaningi Sithole, el principal rival nacionalista de Muzorewa, achaca sus escasos doce escaños a manipulaciones electorales en favor del obispo y a la intimidación de su ejército personal de 7.000 hombres. Pero el propio Sithole ha desplegado no menos de 3.000 auxiliares, y en ningún caso los comicios que han traspasado la Administración de Rodesia-Zimbabwe a la mayoría negra van a pasar a la historia por su limpieza o rigor.

El inmediato futuro de la situación en Zimbabwe depende en gran parte de las decisiones que adopte el Frente Patriótico en su reunión del mes próximo con los líderes de los Estados africanos de la Línea del Frente que apoyan su lucha. A comienzos de mayo, probablemente en Lusaka, Joshua Nkomo y Robert Mugabe discutirán de nuevo la fusión de las ramas política y militar de sus respectivos partidos.

El Frente Patriótico, formado en 1976, ha mantenido hasta ahora una precaria unidad de criterio y acción. Sus dos alas, la Unión Popular Africana de Zimbabwe (ZAPU), dirigida por Nkomo, y la Unión Nacional Africana de Zimbabwe (ZANU), que controla Mugabe, cooperan políticamente en el frente diplomático, pero operan independientemente en el terreno militar.

Las informaciones más solventes atribuyen el. mayor peso de la guerra en Rodesia a los guerrilleros de Robert Mugabe, un marxista doctrinal en posesión de siete títulos universitarios y que ha pasado once años en las cárceles de lan Smith.

Las conversaciones del mes próximo entre ambos líderes del Frente y sus protectores son las segundas que se celebrarán en menos de un mes, después de un encuentro en Dar-Es-Salaam. Se sugiere en medios londinenses próximos a los guerrilleros que el desenlace de las elecciones hace urgente la fusión de ambas organizaciones, que habrán de enfrentarse en los próximos meses a una renovada ofensiva diplomática de Salisbury y a la reunión en Liberia de la Organizaón para la Unidad Africana. Y ello en el marco de crecientes presiones sobre el presidente Carter para que bendiga los comicios rodeslanos y de una eventual victoria conservadora en las elecciones británicss.

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