Francia desestima la demanda de extradición de Apaolaza y Goicoechea

El tribunal de Aix-en-Provence rechazó ayer la demanda de extradición, formulada por el Gobierno español, de los dos militantes vascos Mikel Goicoechea y Martín Apaolaza, por considerar que los hechos incriminados son de naturaleza política. Las autoridades de Madrid habían presentado tres nuevas demandas de detención y, por ello, los dos vascos continúan en la cárcel. Goicoechea, la última noche intentó suicidarse.El asesinato de los dos guardias civiles y el robo a mano armada, hechos en los que se fundaba la demanda española de extradición de los dos militantes vascos, según el Tribunal de Acusación de Aixen-Provence, no son delitos de derecho común: «Las infracciones que se les reprochan a los dos hombres, justificó el tribunal de Aix, han sido perpetradas en el marco de una lucha conducida por una parte de la población vasca con el fin de conseguir su autonomía policial».

En este mismo momento, según la jurisprudencia francesa, Goicoechea y Apaolaza quedaron en libertad, pero, acto seguido, fueron detenidos de nuevo. Un juez de instrucción de Madrid, por medio de la Interpol, había enviado un telegrama en el que se significaban tres demandas de detención contra los dos militantes. Los delitos denunciados, esta vez, se refieren a tres asesinatos de policías, robos y atentado contra una central nuclear.

Posible nueva petición de extradición

Anoche aún no se había recibido una demanda de extradición consecutiva a los hechos referidos, pero, telefónicamente, fuentes bien informadas de Aix indicaron a EL PAIS que una nueva solicitud del Gobierno español en tal sentido podría realizarse en breve plazo.Parece ser que en el momento en que les fue comunicado el rechazo de la extradición a los dos militantes vascos hubo un momento de confusión y Goicoechea intentó suicidarse porque había entendido que serían entregados a la policía española. Días pasados ya había expresado ante sus familiares: «Prefiero morir antes de ser torturado por la policía española.» Su estado de salud ayer, tras veintitrés días de huelga de hambre, era crítico.

«La nueva ofensiva del Gobierno español, en colaboración con el francés, deja entender que las autoridades de Madrid y París han perdido los nervios», se comentaba ayer en algunos medios progresistas parisienses. Incluso quienes se declaran al margen de la probiemática vasca estiman que, «tras las elecciones generales y las municipales, es incomprensible que las autoridades españolas no enfoquen más racionalmente el problema simbolizado por ETA».

Ayer, en Aix, fuentes consultadas por EL PAIS no acertaban a interpretar el sentido de la segunda demanda de extradición de los dos vascos, fundada en delitos similares, a los que ayer fueron calificados de actos políticos por el tribunal competente.