Sadat, lo inesperado en política

Ocho años y medio después de su subida al poder, la actuación de Anuar el Sadat ha venido caracterizándose por su capacidad de adoptar decisiones inesperadas: expulsión de los 15.000 consejeros soviéticos en julio de 1972, desencadenamiento de la guerra contra Israel el 6 de octubre de 1973 y, últimamente, la iniciativa de paz con Israel, que le valió la atribución del Premio Nobel de la Paz para 1978, compartido con el primer ministro israelí, Menahem Begin.Nacido en 1918, la juventud de Sadat estuvo presidida por la lucha contra los británicos. Siguió la carrera militar y entró en contacto con Nasser, del que siempre fue un fiel colaborador. Durante la segunda guerra mundial fue detenido por espionaje por sus contactos con los alemanes. Terminada la guerra volvió a ser detenido y, finalmente, indultado y reincorporado al Ejército. Inmediatamente se integra en el grupo de los «oficiales libres» que destronaron al rey Faruk, el 23 de julio de 1952. Desde entonces ocupó varios cargos políticos a la sombra de Nasser. Ministro de Estado en 1954, presidente de la Asamblea Nacional en 1957, miembro del consejo presidencial en 1962, Sadat fue uno de los cuatro vicepresidentes destituidos por Nasser tras la derrota frente a Israel en 1967, aunque dos años más tarde volvió a ser nombrado vicepresidente con drecho a suceder a Nasser, fallecido el 30 de septiembre de 1970.