Santiago y La Coruña se disputan la capitalidad regional
El tema de la capitalidad futura de Galicia está llamado a ser, sin duda, uno de los principales puntos de fricción localista en los próximos tiempos. Buena parte de las fuerzas políticas han tratado de eludirlo hasta el momento y, de hecho, en la campaña municipal solamente la candidatura de Coalición Democrática por La Coruña hace mención expresa sobre el particular, afirmando en su programa que actuará «sin consensos, sin tapujos ni pactos vergonzantes para conseguir que La Coruña siga siendo, como hasta ahora, la capital de Galicia».
Claro que contra lo que diga CD en La Coruña está la opinión del candidato a la alcaldía de Santiago por dicha coalición. «Con miras a la autonomía que los gallegos deseamos -declaró a EL PAIS Clemente González Peón-, la capital de Galicia no puede ser otra que Santiago, e imagino que los gallegos con conciencia regionalista no lo ponen en duda.»
La misma dicotomía se plantea en el seno de UCD, cuyo candidato a la alcaldía coruñesa, Joaquín López Menéndez, contestó tajantemente que «será una aberración administrativa el que se trate de llevar la capital de Galicia de La Coruña». Para este candidato «no ha razón para crear una nueva capitalidad», y «el trasplante a otra ciudad sería una sangría económica difícilmente soportable por los gallegos».
Razones a favor de la capitalidad de Santiago
Bien al contrario, José Antonio Souto Paz, alcaldable de UCD por Santiago, considera que su ciudad debe ser la capital de Galicia, y se basa, para ello, en razones de tipo geográfico, histórico, cultural y político y, «fundamentalmente -dice-, en la actitud actual de los gallegos, que miran a Santiago como el centro de Galicia».También para el PSOE existen diferencias de criterio desde el punto de vista de sus candidaturas municipales presentadas en las dos ciudades que sé disputan la capitalidad. «Defenderé a La Coruña -afirma Antonio Carro- por razones históricas, sociales, político-económicas y por razones de estructura administrativa y burocrática.» El candidato del PSOE a la alcaldía coruñesa deja abierta, sin embargo, la puerta que permita a todos los gallegos pronunciarse sobre «una cuestión que atañe a toda Galicia».
Con menos beligerancia en cuanto a este tema se mostró Xerardo Estévez, cabeza de lista por el PSOE en Santiago. «Lo más importante en este momento es elaborar un estatuto progresista y maximalista y no entrar en rivalidades locales que puedan obstaculizar su obtención, distrayendo la atención con debates como este de la capitalidad.» Después de explicar que, por esta razón, la candidatura de los socialistas compostelanos no incluía este punto en su programa, añadió, sin embargo, que a nivel personal defiende la capitalidad para Santiago por razones culturales, históricas, geográficas, económicas y prácticas.
Decisión popular
Xosé Manteiga Pedrares, de Unidade Galega por Santiago, manifestó que la capitalidad tiene que ser decidida por los gallegos, fuera de toda lucha localista. Explicó que su coalición no quiere hacer causa especial de este tema, pero apuntó, no obstante, su opinión de que Santiago reúne méritos muy importantes para ser la capital gallega. Más explícito fue todavía el candidato coruñés por la misma coalición, cuando rechazó, contestando a EL PAIS, todo localismo que conduzca a la lucha entre los gallegos. «Algunos de los que hoy reclaman la capitalidad para La Coruña -dijo- estaban el 4 de diciembre de 1976 en los balcones de cierta sociedad coruñesa, desde los que se insultó a los manifestantes por la autonomía.»Para el resto de las candidaturas presentadas, situadas políticamente a la izquierda del PSOE, esta cuestión es una nube de verano. «La derecha quiere dividir energías con la apertura a destiempo de una polémica absurda», contestó un portavoz del Partido Comunista. «Al no existir estado gallego -declaró César Pintos, del Bloque por La Coruña-, la cuestión de la capitalidad es un problema artificial que, en su día, habrá que abordar como una cuestión nacional gallega y no como una disputa caciquil entre dos ciudades.» Cuqui Fraguela, representante de la misma coalición en Santiago, refrendó esta opinión, añadiendo que «hay que dejarse de bromas y que, tal como están las cosas, la capital gallega sigue y seguirá estando en Madrid».
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