Giscard y Schmidt analizarán el problema de los suministros energéticos

El abastecimiento de petróleo acapara la agenda de las conversaciones franco-germanas al máximo nivel que se iniciarán mañana en París. El presidente, Giscard d'Estaing, y el canciller Helmut Schmidt, dedicarán especial atención a la situación en el Próximo Oriente y a sus eventuales repercusiones en el orden energético.El diálogo germano-francés al máximo nivel se desarrollará en el marco de las consultas regulares Bonn-París, establecidas en el Tratado del Elíseo, concluido por De Gaulle y Adenauer en 1963.

Al comentar el posible temario de las consultas, el diario Die Welt subrayó ayer la evolución desigual que domina en los dos países tras la crisis energética de 1973.

Así, mientras la República Federal de Alemania logró reducir del 14 al 9 % la dependencia del petróleo en la producción de energía eléctrica en los últimos cinco años, Francia lo es en un 30 %.

En la agenda de temas políticos. Giscard y Schmidt abordarán también el papel de China en la política internacional.

La ausencia de los ministros de Agricultura en la nueva ronda germano-francesa hace pensar en Bonn que no se tratarán las diferencias agrícolas entre los dos países.

Con el canciller Helmut Schmidt viajarán mañana, miércoles, a París los ministros de Asuntos Exteriores Hans-Dietrich Genscher; de Hacienda, Hans Apel, y de Trabajo, Herbert Ehremberg.

La presencia, por primera vez, del titular de trabajo en las consultas regulares se interpreta aquí como un deseo de los Gobiernos de Bonn y París, de abordar el problema del paro.

Según Die WeIt, Giscard y Schmidt tratarán de fortalecer las inversiones de la industria alemana en las regiones francesas de Lorena y del Norte.