El espíritu de Puebla, el fin de la "teología de la liberación"

El mensaje del Papa a los obispos latinoamericanos reunidos en Puebla ha ocasionado una serie de reacciones en todo el mundo, en las que se coincide que el paso dado por Wojtyla puede representar el fin a la llamada «teología de la liberación», nacida de la Conferencia de Medellín.En Estados Unidos, por ejemplo, los dos diarios de más prestigio -New York Times y Washington Post- coincidieron ayer en su análisis e incluso fueron más lejos, al proclamar el funeral del espíritu de Medellín. Ambos diarios califican el discurso de «conservador» y le tachan de «insípido», ya que pretendió «aplicar en un contexto tercermundista unas teorías pensadas para unas circunstancias generalizadas o, como es el caso, para países del otro lado del telón de acero».

«¿Cómo puede un Papa se interroga el Post- que ha dedicado toda su vida a defender la Iglesia en un Estado marxista, aceptar ahora un análisis de las sociedades latinoamericanas tan cercano a la teoría que él atacó?»

Más dura ha sido, quizá, la reacción de ciertos sectores progresistas alemanes, que han criticado duramente el discurso e incluso al Papa, que para ellos ha llegado hasta a calificar de «extremistas» a los defensores -el peruano Gustavo Gutiérrez y el brasileño Leonardo Boff- de la teología liberadora.

En Londres, el conservador Daily Telegraph ha visto el lado positivo del discurso, y ha señalado que éste «es una aportación histórica a las enseñanzas de la Iglesia sobre las obligaciones políticas y sociales del hombre». «El Papa -agrega- ha reafirmado, en suma, que la misión central de la Iglesia es espiritual.»