Los sindicatos acusan a la patronal vasca de provocar conflictos con fines electorales

La imposición por la patronal de una serie de condiciones previas al inicio de las negociaciones del convenio del metal, consideradas por los trabajadores como «inaceptables y provocativas», ha llevado a las centrales LAB, CCOO, UGT, STV y USO a convocar una huelga general del sector para el proximo día 31. Aunque el número de trabajadores del metal en Vizcaya supera los 115.000, tan sólo a 80.000 afecta el convenio motivo de polémica.Las condiciones previas a que tratan de imponer los empresarios del sector se basan en el arbitraje de la Consejería de Trabajo del CGV en materia de fijación de salarios y jornada de trabajo, en el arbitraje de fórmulas de desenganche del convenio de las empresas que no puedan hacer frente a los costos de aquél, flexibilidad de plantilla hasta el 10% y el compromiso de paz social en el período de negociación del convenio.

Tal proposición de la patronal ha sido recibida con evidente enfado por las centrales integrantes de la mesa de negociación, que la consideran inaceptable, provocación para los trabajadores y motivo suficiente de ruptura de negociaciones. Critican la actuación de los empresarios, a la que califican de «política», ya que «intentan capitalizar las negociaciones de este convenio en las próximas elecciones, dado que a las mismas se presentan dos de los miembros de la. mesa patronal, Luis Olarra y su presidente, José,Luis Inchausti, en la coalición Unión Foral del País Vasco».

La huelga prevista para el día 31 se celebrará de forma legal, y a tal efecio se van a presentar hoy o mañana en la Delegación de Trabajo las solicitudes de paro. No obstante, ayer mismo los portavoces de las centrales sindicales citadas anunciaron su deseo de volver a negociar con la patronal siempre que aquélla rectifique lo que consideran una actitud abusiva e intransigente. Ruptura en contrucción A los dos meses de haberse iniciado quedaron ayer rotas las negociaciones para el convenio de construcción en Vizcaya, sector que agrupa a unos 25.000 trabajadores en toda la provincia. La mesa negociadora, al anunciar la ruptura, adelantó la posibilidad del inicio de una huelga general del sector el próximo miércoles día 31, coincidiendo con la ya convocada por la mesa del convenio del metal.

Este extremo deberá concretarse en una asamblea de delegados prevista para mañana, según informa Patxo Unzueta.

La ruptura de las negociaciones se produjo al negarse la patronal a variar su oferta inicial. Los puntos principales de desacuerdo hacen referencia a la revisión salarial, que los trabajadores proponen sea semestral, y al reconocimiento de las secciones sindicales de empresa.

En una rueda de prensa celebrada en Bilbao, la mesa negociadora -en la que están representados la mayoría de las centrales- expresó su sospecha de que «esta ruptura inesperada de las negociaciones pueda estar inspirada por maniobras electorales de la CEOE, interesada en dar una imagen de desorden laboral que canalice los votos hacia la derecha».