Serenos marginados

El decreto 1.199/74 de 4 de abril del Ministerio de la Gobernación fijaba las normas para la integración de los serenos de comercio y vecindad en las plantillas del personal de los ayuntamientos.El Ayuntamiento de Madrid, para dar cumplimiento a dicha disposición, en sesión plenaria ordinaria, de 23 de diciembre de 1974, creó 1.036 plazas de la escala a extinguir de vigilantes nocturnos.

El tener cumplidos 65años de edad el día 30 de noviembre de 1974 fue causa de quedar excluidos de la integración en la plantilla municipal.

Con ello 128 serenos que contaban con más de 65 años, precisamente los más necesitados de proteccióft, nos vimos marginados y tuvimos que seguir trabajando para poder subsistir, sin más perspectiva que salir todas las noches, sin domingos, ni festivos, ni vacaciones, sin Seguridad Social, y todo ello hasta que por imposibilidad física no se pueda resistir más y te mueras.

A esta situación viene a poner remedio el acuerdo del pleno municipal del Ayuntamiento de Madrid en sesión del 29 de septiembre de 1978, en el que se aprobó conceder una pensión de 9.300 pesetas a los serenos que nos encontramos en las condiciones citadas. Pero es el caso que somos muchos los que en caso de demorarse el cumplimiento de dicho acuerdo no disfrutaremos ya de dicho beneficio.

Mi situación personal puede ser un ejemplo. Con mis 59 años de servicios ininterrumpidos al vecindario y al Ayuntamiento de Madrid, con 87 años de edad, he tenido que salir a trabajar todas las noches para poder subsistir yo y mi esposa de noventa años y hasta que hace poco más de un año los achaques propios de mi edad me han impedido hacerlo y ahora, al no tener un duro de jubilación, mi esposa y yo somos una carga para mis hijos.

Yo, desde las páginas de EL PAÍS, quiero agradecer al actual Ayuntamiento de Madrid, presidido por José Luis Alvarez, su postura, en contraposición de la inhumana decisión del Ayuntamiento en 1974, pero por favor, si no se dan un poco de prisa en aplicar el acuerdo, van a ser muy pocos los supervivientes que se van a beneficiar de él.