Los abstencionistas

Leí en su diario el magnífico artículo de Fernando Savater sobre la abstención. También el desagradable dibujo de Máximo dirigido a Savater y demás abstencionistas (entre los que me encuentro) y después el artículo de F. Alburquerque Llorens defendiendo también la postura abstencionista. No voy a dar ninguna opinión sobre la abstención ya que se han dado bastantes; pero referente al dibujo de Máximo de «Democracia; abstencionistas abstenerse», he de decir que yo gustosamente me abstendría de dicha democracia, de la que «nos han aprobado» en el referéndum, pero, por desgracia, y en contraste con la opinión de F. Alburquerque Llorens, no podemos caminar nosotros mismos hacia otra dirección con nuestro carrito (en contraposición al tren fantástico y cómodo) ya que para desgracia nuestra este tren «cómodo y fantástico» que es la demo(Pasa a la página 10)

(Viene de la página 9)

cracia que nos ofrecen nos arrolla a todos. Este es el respeto que la democracia, esta democracia, nos ofrece a la casi tercera parte de españoles que no quisimos votar. Atendiendo a la invitación de Máximo yo me abstendría de esta democracia, pero es de muy mal gusto el hacernos esta invitación cuando sabe que no tenemos otro remedio que dejar que ese tren nos atropelle y nos lleve por delante. Este es el precio que pagan las minorías; una minoría del 33%.