Israel endurece su postura

Tras la decisión israelí de llamar a Tel-Aviv a su delegación militar que negociaba con Egipto, en Washington, la retirada del Sinai, y las firmes declaraciones del primer ministro Menahem Begin, y de Asuntos Exteriores, Moshe Dayan, los observadores diplomáticos de Jerusalén se preguntan si Israel trata ahora de renegociar los acuerdos de Camp David. Precisamente el domingo cumplió el plazo fijado en estos acuerdos para la consecución de un acuerdo de paz egipcio-israelí.«No cambiaremos nuestra postura. Israel rechaza rotundamente las nuevas exigencias egipcias», declaró ayer Menahem Begin ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento. «No tenemos intención de mantener una nueva negociación con El Cairo sobre la base de las actuales propuestas egipcias», afirmó, por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Dayan.

En un informe interno destinado a los altos funcionarios de su Ministerio, Dayan explica por qué desaconseja abiertamente una reaparición de las negociaciones: porque las propuestas recogidas por el secretario de Estado norteamericano, Cyrus Vance, en El Cairo indican claramente que Egipto no acepta una paz separada con Israel. Por otro lado, la exigencia egipcia de vincular el intercambio de embajadores entre los dos países y la liquidación del Gobierno militar sobre todo el territorio de Gaza y Cisjordania, son consideradas por Dayan como «inaceptables» para Israel, que pretende mantener estos territorios bajo su control y quedar con las manos libres en materia de colonización judía en la zona.

Todo esto quiere decir que los dirigentes israelíes no quieren continuar las negociaciones sobre sus actuales bases y prefieren volver a la situación anterior a Camp David y renegociar todo en una nueva cumbre tripartita.