La CEOE plantea a sus asociados un duro marco para la negociación colectiva

La Asamblea General de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), por boca de su presidente, Carlos Ferrer, recomendó ayer, de cara a la negociación de convenios colectivos, aumentos salariales por todos los conceptos, que las ofertas patronales no superen el 10% sobre los salarios de 1978.

Según señaló el señor Ferrer, la CEOE podría recomendar en materia de negociación colectiva con carácter general, y sin perjuicio de posteriores instrucciones más concretas, lo siguiente:- Los convenios sectoriales deben evitar la escalada infinita de negociaciones de ámbito inferior, a nivel de empresa.

- No se pactará reducción alguna de jornada. Esta sólo podrá ser reajustada si las horas-año trabajadas no son inferiores a las efectuadas en el presente año.

- Deberá procurarse suprimir y absorber o congelar en su actual cómputo aquellos conceptos no directamente productivos que hoy constituyen el salario. Sólo así se puede conseguir configurar en cierto plazo de tiempo el salario-hora profesional a percibir por unidad de tiempo trabajado, objetivo fundamental para el empresario español.

- Los aumentos salariales no serán superiores al 10%. En aquellos convenios en los que durante 1978 se hubieran seguido pactando tablas de salarios mínimos teóricos, éstas a su vez sólo podrán ser incrementadas como máximo en el porcentaje antes citado.

- En materia de legitimación para negociar, la CEOE debe estimar que sólo es posible hacerlo con grupos capaces de garantizar el cumplimiento de lo pactado y, por ello, suficientemente representativos. A estos efectos, la tasa o porcentaje del 10% de delegados y miembros de comités de empresa parece suficiente en orden a ofrecer la garantía antes requerida.

- Las materias de carácter político, social y sindical deberán ser relegadas de los ámbitos de negociación sectorial, territorial o de empresa, al ámbito más general de una negociación CEOE-centrales. De no producirse ésta, tales temas deberán ser deirnorados en su negociación. La CEOE insiste en que estos temas, y de manera especial los que integran el nuevo sistema de relaciones laborales que la CEOE considera imprescindible y entre los que destaca fundamentalmente una nueva legislación sobre contratación y empleo que permita lajusta adecuación de las plantillas a la efectiva situación de las empresas. Las medidas que deban asegurar definitivamente el necesario orden laboral y el incremento de la productividad exigen modificaciones legales importantes y por ello deben ser discutidos y acordados, con urgencia, a nivel nacional mediante negociaciones entre Gobierno, la CEOE y las centrales sindicales.

El señor Ferrer Salat, a lo largo de su intervención ante la asamblea, realizó un análisis de las posturas de todas las partes .interesadas en la situación económica. Manifestó que el Gobierno conoce que no habrá acuerdos si no se despejan las incógnitas e interrogantes políticas y trata de conseguir ante la opinión pública una actitud favorable a la realización de los mismos.

Según el presidente de la ClEOE, el PCE y CCOO son conscientes de la grave situación económico-social y hasta qué punto la incipiente democracia española es débil. Por su parte, el PSOE y UGT aceptarían un acuerdo social a un año, con carácter global, asumido por centrales y CEOE, que supusiera la fijación de una tasa salarial limitativa de los aumentos que pudieran ser pactados. El Gobierno -continuó el señor Ferrer- es consciente de la dificultad que supone negociar estos acuerdos m,anteniendo la incógnita de si habrá o no elecciones generales. «Evidentemente, si hay elecciones generales, es muy difícil que se logren acuerdos eficaces. Ambas centrales, en tal caso, plantearían contrapartidas muy costosas y, desde luego, no permitirían correcciones en materia de empleo».

La postura de la CEOE ha quedado ya reflejada anterior mente al reseñar los puntos que, según ella, deben negociarse en los próximos convenios, aspectos que pueden considerarse como duros a la vista de las actuales circunstancias. A este respecto, el secretario general de la CEOE, José María Cuevas, señalaba a EL PAIS que el tope salarial im puesto es una medida dura, ya que según los estudios realizados por la CEOE serán muchas las empresas que no puedan hacer frente a este incremento.

La asamblea aprobó la modificación de estatutos y la consiguiente creación de dos nuevas vicepresidencias, una de las cuales fue cubierta inmediatamente por Carlos Pérez de Bricio, ex ministro de Industria y recientemente nombrado presidente de Confemetal, patronal del sector del metal.

La segunda vicepresidencia, creada para un representante de la pequeña y mediana empresa, quedó vacante «en espera de tiempos mejores», según señaló Carlos Ferrer. Esta segunda vicepresidencia, de reciente creación, será ocupada cuando la CEPYME decida integrarse en la CEOE, hecho este que puede producirse en breve, si bien se cree que la oposición a esta integración procede del actual secretario general de la patronal, señor González Olivé.