Oreja visitará la URSS en marzo

Los medios de información soviéticos anunciaron ayer que el ministro español de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja Aguirre, visitará la URSS, invitado oficialmente, durante el próximo mes de enero. Asimismo, EL PAIS ha sido informado de que el presidente Suárez proyecta viajar a Moscú en el transcurso de 1979.

La visita de Oreja a la URSS puede calificarse de paso decisivo para la normalización de relaciones entre ambos países, que durante el último año y medio han estado siempre expuestas a pequeñas, aunque fuertes, tensiones, provocadas en su mayor parte por cuestiones comerciales.En Moscú se considera que la relación entre la URSS y España debe ser defendida y resuelta por instancias mayores de gobierno, con una nueva dinámica política. Según nos señaló un observador extranjero en la Unión Soviética, «terceros grupos y países se benefician actualmente de las pequeñas diferencias que a niveles comerciales y políticos separan a España de la URSS».

El viaje del ministro de Comercio a Moscú ha representado, aparentemente, el primer paso concreto en dirección de vínculo normal. Según ha sabido EL PAIS, la entrevista de García Díez con Kosiguin no fue precisamente una conversación convencional. Durante

la entrevista se registraron momentos de gran tensión, y, al parecer, hasta hubo duros enfrentamientos.

La visita del señor Oreja puede transformarse en un nuevo eslabón de las relaciones que tanto España como la URSS desean aparentemente aumentar. Los dirigentes soviéticos que se ocupan de los asuntos de nuestro país fueron informados en los últimos días sobre el interés del presidente Suárez en los asuntos políticos internacionales, que probablemente se acentuará cuando se hayan cubierto los objetivos principales de la política nacional española.

Según todos los indicios, Adolfo Suárez ha expresado su intención de visitar la URSS, probablemente en el próximo mes de marzo. En fuentes ofíciales de Moscú se ha comentado a EL PAIS que después de la visita del señor Oreja, lo lógico es que viaje a España su colega soviético Andrei Gromiko. Todo queda pospuesto a los próximos acontecimientos.