Calvo Sotelo quiere negociar con la CEE a principios de 1979

El ministro de Relaciones con las Comunidades Europeas, Leopoldo Calvo Sotelo, quiere que las negociaciones con la CEE, para el ingreso de España en la Comunidad, se inicien a primeros de 1979. aunque la parte comunitaría, la Comisión de Bruselas, no haya recibido las instrucc iones precisas o mandato del Consejo de Ministros de la CEE. Para que ello ocurra es necesario que dicho Consejo apruebe, al menos, el dictamen sobre la candidatura española que en la actualidad ultima la Comisión Europea y que Madrid desea que se debata en el Consejo comunitario del día 19 de diciembre.El señor Calvo Sotelo, de acuerdo con el titular de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, acordaron la pasada semana, en Madrid, lanzar una ofensiva diplomática sobre las nueve capitales de la CEE para conseguir que el dictamen de la Comisión -del que se conocen ya su esquema inicial y algunos documentos- se apruebe en diciembre próximo, aprovechando que la presidencia del Consejo de la CEE la ostenta la República Federal de Alemania, país aliado de España en este proceso.

Lo cierto es que, una vez conocido el dictamen de la Comisión -que de seguro será favorable al ingreso de España en la CEE-, el Gobierno español deberá decidir formalmente si se embarca en un proceso negociador sin mandato y si decide poner en marcha los programas,de cooperación conjunta hispano-comunitaria (a los que hacía referencia al llamado fresco sobre la candidatura de España, elaborado también por la Comisión de Bruselas) o si, por el contrario, decide conocer las instrucciones necociadoras del ejecutivo, al completo, y el calendario y sistema de integración que la Comunidad ofrece a España, antes de avanzar en toda negociación. La opción que en el palacio de La Trinidad (Ministerio para la CEE) parece definitiva en favor de la negociación inmediata sin mandato, no cuenta con las bendiciones de todos los ministerios económicos, que temen que la CEE progrese en los temas,industriales y deje sin precisar otros claves y peligrosos para España como lo son la agricultura, la libre circulación de trabajadores y la reforma institucional.

En Bruselas los trabajos del dictamen van ya muy avanzados y se conocen algunos de los textos-proyectos elaborados por la llamada belegación para las Negociaciones sobre la Ampliación de la CEE.

He aquí los apartados esenciales del esquema del dictamen sobre España, elaborado por la Comisión Europea:

Introducción. Integra cuatro apartados: calendario de la adhesión; decisión del Consejo; contactos de la Comisión con el Ministerio de Relaciones con la CEE y con los nueve países comunitarios, y referencia al fresco.

Consideraciones generales. Siete capítulos tiene este apartado en el que se dice: constatar que la democracia es un hecho consumado en España; respuesta política y positiva de la CEE; el acercamiento político no debe perder de vista las dificultades económicas; descripción de la situación macroeconómica; España tiene un peso muy distinto a Grecia y Portugal por su dimensión política, nivel de desarrollo y demografía, lo que proporciona problerrías al país candidato y a los nueve, problemas específicos (agricultura, sectores industriales en dificultad y problemas de empleo). Conclusiones: una ayuda al desarrollo no es necesaria pero se perfilan acciones concertadas, comunes y específicas, y aplicación y evolución del acuerdo de 1970.

Consideraciones específicas. Incluyen un total de quince capítulos o apartados: referencia al fresco; unión aduanera; agricultura; industria; energía; libre circulación de trabajadores y temas sociales; aspectos regionales; derechos de establecimiento; circulación de capitales; transportes; competencias; fiscalidad; relaciones exteriores; Canarias, y situación aduanera.