Empresarios y trabajadores piden un calendario político definido

Patronales y centrales sindicales mantuvieron ayer puntos de vista muy similares a los que vienen propugnando durante las últimas semanas con relación a la necesidad de establecer un pacto económico y social para el año próximo. La reunión fue organizada por la Asociación para el Progreso de la Dirección.Los representantes de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), los señores Ferrer y Cuevas, señalaron que hay que elaborar una política económica y laboral en la que participen las fuerzas sociales; dentro de esta política debe ser objetivo esencial la recomposición de la rentabilidad empresarial, la reducción de la inflación, fijar claramente los límites del sector público para que crezca en menor medida que el privado, concretar las políticas necesarias para reactivar las inversiones privadas y distribuir mejor las disponibilidades líquidas.

Marcelino Camacho, secretario general de CCOO, señaló en su intervención que consideraba imprescindibles unos acuerdos políticos y económicos suscritos por los partidos políticos, el Gobierno, las centrales sindicales y las organizaciones empresariales, con una duración suficiente para que permitan abordar las reformas estructurales necesarias para nuestra economía. Dijo que había que desacelerar la inflación como mínimo hasta porcentajes de entre el ocho y el 10%, manteniendo la capacidad adquisitiva de los salarios. También señaló la necesidad de elaborar un plan nacional de solidaridad, contra el paro y potenciar el papel de las empresas públicas en la reconversión de sectores en crisis.

Nicolás Redondo, secretario general de UGT, señaló, por su parte, que no se puede aplazar por más tiempo la definición de un nuevo marco de relaciones industriales Sobre los pactos dijo que deberían firmarse entre sindicatos, patronales y Gobierno para un período de un año, aunque a finales del próximo ano podría negociarse un nuevo pacto para el año 1980. Los acuerdos deben garantizar el empleo, el mantenimiento del poder adquisitivo y el protagonismo de los sindicatos. «La salida de la crisis requiere la disminución del paro, para lo que se necesita la recuperación de la inversión privada, que significa más del 85 % de la inversión total española -dijo el señor Redondo- Para lograr esta recuperación, según una encuesta realizada por UGT en cien empresas, es preciso, como primer factor, la seguridad política, la fijación del calendario de elecciones municipales y legislativas, que ayudarán a suprimir incertidumbres en este sentido.»

El señor Leal, secretario de Estado de Economía, señaló en su intervención durante el almuerzo que «no hay lugar para el catastrofismo irresponsable, que es muchas veces reflejo de intenciones reaccionarias frente a la existencia de un grado razonable de esperanza ganado con el esfuerzo colectivo. Por otra parte, el aumento del número de parados, al tiempo que impide cualquier tipo de triunfalismo, permite hacer una llamada a la solidaridad con los trabajadores no instalados, sobre los que ha recaído con mayor fuerza el coste del ajuste».