Mutua acusación de cinismo entre Letamendía y Martín Villa

Una mutua acusación de cinismo entre el ministro del Interior, Rodolfo Martín Villa, y el diputado de Euskadiko Ezquerra, Francisco Letamendía, se produjo ayer en el Pleno del Congreso durante la sesión de la tarde. El señor Letamendía había interpelado al Gobierno sobre la detención, en territorio español, de Vicente Aldalur, entregado ilegalmente por la policía francesa a la española, y el señor Martín Villa negó las acusaciones de irregularidad en la actuación policial española.

La interpelación del señor Letamendía relató las peripecias de Vicente Aldalur, quien entró herido en Francia desde territorio español y, tras no obtener el tratamiento de refugiado político, fue puesto por las autoridades francesas en la frontera y entregado a la policía española. El señor Letamendía denunció la complicidad española en un acto ilegal de la policía francesa y pidió la amnistía para Aldalur, cuya detención atribuyó a causas políticas.El ministro del Interior, Rodolfo Martín Villa, resaltó la legalidad de la actuación gubernativa española y señaló que las autoridades españolas se limitaron a recoger un expulsado de Francia, que fue puesto inmediatamente a disposición judicial.

En la rectificación, el señor Letamendía provocó la desbandada de diputados de UCD -de los que ya quedaban muy pocos, pero que se redujeron a una veintena-, al manifestar que se dirigía a los miembros de la Cámara de los grupos que fue enumerando, sin citar a UCD ni a AP. Insistió en la connivencia de la policía española con la francesa y acusó de cinismo al señor Martín Villa, quien rechazó el calificativo y lo puso en comparación con la consideración hecha por el señor Letamendía de que la conducta que produce la explosión de un artefacto es una conducta política. «Cinismo por cinismo, que juzgue la Cámara», concluyó el ministro del Interior.

Críticas administrativas de López Rodó

Otro momento destacable de la sesión fue la doble intervención del ex ministro Laureano López Rodó, quien preguntó al Gobierno sobre el desarrollo de una ley de 1975 relativa a residuos urbanos y sobre el plazo que deben cumplir las disposiciones administrativas de carácter general entre su publicación en el Boletín Oficial del Estado y su entrada en vigor.

A la primera pregunta contestó el ministro de Industria, Agustín Rodríguez Sahagún, quien culpó de la situación actual a los años y años en que las autoridades hacían «oídos de mercader» a las peticiones ciudadanas. Prometió que antes de finales de 1978 estaría reglamentada la cuestión.

En relación con el segundo tema, Laureano López Rodó denunció el abuso y corruptela que supone dejar dormir, en los despachos las disposiciones cuya vigencia se exige después, a partir del día de su publicación. No faltó la crítica a los organismos de la Presidencia del Gobierno -«crecida de forma elefantiásica»- y la acusación a quienes guardan astutamente los decretos. El ministro de la Presidencia, José Manuel Otero, negó que se tratara de una corruptela y dijo que la vigencia inmediata era conveniente, en ocasiones, para evitar especulaciones. Esta respuesta suscitó la indignación del señor López Rodó, quien preguntó si de lo que se trata es de que sólo especulen los funcionarios del Ministerio correspondiente.

Con menores tensiones se desarrolló la interpelación del señor Pau y Pernau sobre cámaras agrarias, a quien respondió el ministro de Agricultura, Jaime Lamo de Espinosa, quien recordó que las actuales proceden de unas elecciones democráticas.

Asimismo, el diputado comunista Jordi Solé Tura preguntó al Gobierno sobre la situación de la empresa Térmicas del Besós y la peligrosidad que su edificación irregular e ilegal supone para la zona de Cubellas en sus aspectos agrícola, turístico y pesquero Rodríguez Sahagún negó que se tratara de irregularidad y atribuyó a exageración o ignorancia de datos las protestas de la población.

La última pregunta fue también formulada por un comunista, Emérito Bono, y la respuesta correspondió al mismo ministro. Ante la inquietud manifestada por el diputado por la crisis de la construcción naval en Galicia, el señor Rodríguez Sahagún aludió a las dificultades del problema y a las acciones que el Gobierno realiza para salir de una situación que no dudó en calificar de dramática.

Devolución de los bienes incautados en la guerra civil

La abstención del Grupo parlamentario de Unión de Centro Democrático hizo posible ayer en el Pleno del Congreso de Diputados que prosperase una moción del Grupo parlamentario de los Socialistas de Cataluña que plantea la devolución a sus legítimos propietarios de los bienes incautados por razones exclusivamente políticas a diversas entidades, cooperativas, cofradias, mutualidades y casas del pueblo por el bando vencedor en la guerra civil durante los años de 1939 a 1943.

Aplausos discriminados a Frei

Antes de iniciarse el Pleno propiamente dicho, el presidente del Congreso de Diputados, señor Alvarez de Miranda, pidió el aplauso de los diputados para el dirigente de la Democracia Cristiana de Chile, Eduardo Frei, que se encontraba de visita en el edificio del palacio de las Cortes.

La invitación del señor Alvarez de Miranda sólo,fue atendida por los diputados de UCD, siendo claramente rechazada por socialistas y comunistas. Posteriormente, el portavoz del Grupo parlamentario Comunista, Santiago Carrillo, explicó que la actitud de su grupo fue debida a que la actuación pasada del señor Frei facilitó la victoria del general Pinochet, y en estos momentos no está suficientemente claro que el dirigente demócrata cristiano chileno esté actuando de acuerdo con la Unidad Popular para restaurar la democracia en Chile.

Por su parte, el diputado socialista Manuel Marín explicó que su grupo había querido expresar con su actitud su discrepancia con la trayectoria seguida por el señor Frei durante el Gobierno de Unidad Popular, que presidía Salvador Allende. César Llorens, de UCD, manifestó, finalmente, que !u grupo habla aplaudido a Eduardo Frei, actualmente en Madrid para asistir como invitado al congreso constituyente del partido del Gobierno, porque es luna figura de la Democracia Cristiana, que «UCD, como partido, declara ideológicamente asumible». Según el diputado ucedista, «no hay motivo para desconfiar del sentido d,emocrático de Frei, a pesar de que esté por medio el problema histórico de Allende».

Medida de justicia

La devolución de los bienes incautados con motivo de la guerra civil a entidades civiles, planteada en nombre de los socialistas por Joan Reventós, fue presentada por éste como una «medida de reparación en estricta justicia largamente esperada y sentida por el pueblo».

En nombre del Gobierno, el ministro de Trabajo, Rafael Calvo Ortega, anunció que,el inventario de los bienes incautados con motivo de la guerra civil ya estaba concluido a instancias del Gobierno y que aquél se encontraba a disposición de los diputados.

La enmienda del diputado Heribert Barrera, por la que se pretendía extender la devolución de los bienes incautados a las entidades de carácter político, fue rechazada por el propio señor Reventós por «razones de oportunidad».

«Más adelante -dijo-, a medida que se consolide la democracia, podremos plantear el problema de fondo sobre la devolución de los bienes incautados a entidades políticas, incluido el patrimonio sindical.»

Con anterioridad a este debate, el Pleno aprobó por unanimidad el dictamen de la Comisión Mixta Congreso-Senado sobre la modificación de los artículos de la ley de Enjuiciamiento Criminal que hacen referencia a la asistencia letrada al detenido desde.el momento de la detención. Los portavoces de todos los grupos parlamentarios expresaron su satisfacción por la reforma introducida, que garantiza plenamente los derechos del detenido.