Los sandinistas advierten sobre una posible intervención norteamericana

Se encuentra en España el responsable para Europa del Frente Sandinista de Liberación de Nicaragua, Miguel Castañeda. Médico, nacido en Managua hace treinta años, Castañeda ha venido a nuestro país a mantener contactos con las fuerzas políticas democráticas en demanda d e solidaridad. Con él ha conversado nuestro compañero -El objetivo de mi viaje, además de la búsqueda de solidaridad de las fuerzas políticas españolas, es el de prevenir a estas fuerzas sobre el peligro que se cierne sobre Nicaragua de una intervención. militar auspiciada por el imperialismo norteamericano.- «Nicaragua se encuentra -añade- en una guerra abiertamente declarada por todo el pueblo y su vanguardia, el Frente Sandinista, contra la dictadura militar somocista. Las fuerzas regulares del Frente han conquistado las ciudades estratégicas de Chinandega y León, así como la ciudad norteña de Estelí. En el Sur, el Frente controla buena parte de la carretera más importantes del país, la Interamericana, y de la ciudad de Rivas. Sabemos -prosigue- que contamos con un enemigo poderoso, técnica y materialmente mejor equipado que nosotros, pero a este enemigo oponemos nuestra superioridad estratégica, política y moral.»

«Además -agrega Castañeda-, no se trata de una lucha con una dimensión exclusivamente militar. El país vive una huelga general indefinida de trabajadores y un paro patronal también indefinido. El pueblo entero de Nicaragua está decidido a terminar con la dictadura. En cuanto a los efectivos guerrilleros, el dirigente sandinista señala que las fuerzas regulares del Frente Sandinista se componen de 1.500 hombres militarmente preparados. Como fuerzas auxiliares, actúan las Milicias Populares Sandinistas, nutridas por obreros, estudiantes y campesinos -y cuya actuación de hostigamiento permanente al enemigo garantiza la acción militar de las fuerzas regulares», afirma.

Asimismo indica que los guerrilleros utilizan artillería ligera de 120 milímetros. A propósito de los apoyos exteriores, Castañeda dice que «el pueblo cubano y su Gobierno, así como de todo el campo socialista, cuentan con una solidaridad moral semejante a la de algunas democracias como Venezuela, México y los Gobiernos nacionalistas de Panamá y Jamaica. Además -continúa-, contamos con la solidaridad de todos los antifascistas y antiintervencionistas del mundo. »

-Recientemente murió en accidente el general de la Guardia Nacional nicaragüense José Iván Allegret. ¿Ha participado directa o indirectamente en su muerte el Frente Sandinista?

-No. La muerte de este general en parte de las contradicciones que sacuden al Ejército somocista. Allegret, miembro del Estado Mayor de la Guardia Nacional y jefe de Operaciones del Ejército, además de encargado de la Inteligencia Militar, descubrió un complot dentro del Ejército para derrocar a Somoza, en el cual estaban decenas de jefes militares, ochenta de los cuales se encuentran detenidos. Alertaron a Somoza del complot y los conspiradores, denunciados por el general y sus ayudantes, alteraron los mandos del avión en el que viajaba y forzaron el accidente que causó su muerte.

«Salvo que se diera una intervención militar norteamericana, pienso que la guerra no pasa de fin de año. La injerencia norteamericana -dice- podría obligarnos a una resistencia prolongada. En cuanto a la intervención del Condeca, Estados Unidos está haciendo todo lo posible porque se produzca. »

Respecto a la alternativa política del Frente, Miguel Castañeda establece que su objetivo estratégico Final es la liberación nacional y social. «Dentro de este objetivo -afirma- sabemos que hemos de pasar por etapas distintas y la etapa más inmediata es el derrocamiento de la dictadura y el establecimiento de un Gobierno democrático y popular. Una vez cumplido el objetivo militar prioritario, ganar la guerra -continúa-, la primera fase es el establecimiento de un Gobierno provisional democrático encabezado por el grupo de los doce y en el cual tengan cabida las diferentes fuerzas que de manera decidida hayan participado en el derrocamiento de la dictadura.»