Cuatro nombres nuevos en la candidato del PTE para las elecciones locales
Ayer por la tarde tuvo lugar la presentación oficial de Joaquín Aramburu como candidato a la alcaldía madrileña por parte del Partido del Trabajo de España (PTE) en su sede provincial.Joaquín Aramburu Maqua tiene treinta años, está casado y es padre de un hijo. En la actualidad, es secretario general de la Federación de Madrid del PTE y miembro del comité ejecutivo y del comité central federal del partido. Su participación en la dirección del mismo se remonta a 1972. Profesionalmente es arquitecto-urbanista y fue miembro de la junta de gobierno del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM). También fue profesor en la cátedra de Dibujo Técnico en la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid durante tres años. Dentro de su partido está considerado como uno de los especialistas en urbanismo y política regional.
Junto a él figurarán en la cabecera de candidatura por Madrid: Elena de la Torre, presidente de la Coordinadora de Amas de Casa de Madrid; José Antonio Murcia Jaén, ex presidente de la Asociación de Vecinos de Malasaña y ex tesorero de la Federación de Asociaciones de -Vecinos de Madrid; Tomás Rodríguez Villasante, ex presidente de la cooperativa de viviendas,Travenco, de Zarzaquemada (Leganés) y autor de varios libros sobre el movimiento ciudadano, y Gustavo Figueroa.
Joaquín Aramburu, durante la rueda de prensa mantenida, señaló que «la ley de Elecciones Locales es más antidemocrátical y restrictiva que la normativa electoral del 15 de junio». Destacó como aspectos negativos de esta ley: «El hecho de que prime las candidaturas mayoritarias y restrinja las de los partidos minoritarios; la elevación al 5 % del mínimo a obtener en cada municipio por cada candidatura del total de votos válidos; el bajo número de concejales a elegir, especialmente restringido en las grandes concentraciones de población; la atribución de concejales según el método de D'Hont, todo lo cual acerca más el sistema a una fórmula mayoritaria que proporcional; dificulta las alianzas electorales, obligando que se establezcan a nivel provincial como mínimo, cuando las elecciones tienen carácter local; la elección de alcalde de forma indirecta y la exclusión del Comité de Radio y TVE de, los partidos extraparlamentarios.»
A pesar de estos factores, considera las elecciones como un hecho «muy positivo», especial mente porque «posibilita la renovación de los Ayuntamientos con alcaldes y concejales demócratas, sensibiliza a la población con todo lo relacionado con la gestión municipal y supone un factor de desarrollo de la democracia.». Posteriormente trazó un esbozo de los temas que más preocupan en este momento a su partido.
El PTE cuenta ya con 10.000 candidatos para todo el territorio nacional y espera cubrir las 186 circunscripciones electorales. «Somos un partido en alza y conseguiremos muchos concejales. El 14% del electorado del 15 de junio está descontento y elegirán posiciones más resolutivas que el PCE.»
En un plano general, los puntos cruciales del terrorismo, la situación económica y el paro pasan -para el PTE- por una solución política y no exclusivamente policial, para el primer aspecto; en cuanto al segundo, advierte que ya se opusieron en su momento al «ahora fracasado pacto de la Moncloa, que -precisa Aramburu- va a ser sustituido en breve por otro aún más draconiano», y, respecto al paro, sus sondeos de opinión detectan que es lo que más, preocupa a una mayoría de ciudadanos, a lo cual sigue los precios (un 15 % de los encuestados) y el orden público (un 5 %).
En su alternativa política figuran dos dimensiones: pactar con las fuerzas de izquierda un programa mínimo común, que aclare las ideas del electorado y avale el cumplimiento de las promesas, y una serie de medidas a corto, medio y largo plazo. El programa mínimo común «vamos a empezar a negociarlo, sin ánimo de protagonismo y con inclusión de toda la izquierda, desde el PSOE». El resto de lo,5 planteamientos se resumen en:
1. Independencia económica y financiera de los ayuntamiento y descentralización de los mismos en beneficio de juntas de distritos, así como mancomunidad de municipios. Plan de autonomía de Madrid.
2. Solución al problema de la vivienda. Tanto las 40.000 chabolas y las 60.000 chabolas verticales o infraviviendas de Madrid se erradicarían con la construcción de 50.000 viviendas anuales de promoción directa, mediante expropiación de suelo y canalización de créditos con prioridad al INV.
3. Oposición a la política gubernamental sobre enseñanza.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.