El texto preautonómico asturiano, fruto de un compromiso entre las distintas fuerzas políticas

Los partidos políticos parlamentarios asturianos han recibido con satisfacción el real decreto que concede la preautonomía a esta región, aunque todos matizan que el texto aprobado es el resultado de un compromiso que no satisface plenamente a la derecha, a la izquierda y al centro.El vicepresidente de Alianza Popular de Asturias ha manifestado a EL PAÍS que el órgano preautonómico debiera llevar la denominación de Junta General del Principado de Asturias y no la de Consejo Regional, ente que, en opinión del dirigente aliancista, debería funcionar a través de la Diputación en su primera fase, tal como pretendía el ministro del Interior, Rodolfo Martín Villa. Para el secretario general de organización del PSOE, el decreto beneficia a la derecha, pero contiene posiciones mucho más ventajosas para el pueblo asturiano que la fórmula 14-30 que pretendía el Gobierno para después de las municipales. El secretario general del PCA valora positivamente la concesión de la preautonomía, a la que da el valor de una base de partida hacia la autonomía plena. A los comunistas el texto preautonómico tampoco les agrada, pero justifican su aceptación para no facilitar las a Clavero y demorar aún más la autonomía provisional. El secretario general de UCD de Asturias considera el texto operativo y práctico, aunque no es el que su partido estimaría como perfecto. El senador independiente Atanasio Corte Zapico está interesado en conocer el texto del decreto-ley que articulará las relaciones entre la Diputación y el Consejo Regional para poder opinar con suficientes elementos de juicio.

El ente preautonómico asturiano se denominará Consejo Regional y estará constituido durante el período trarsitorio por catorce miembros designados por los catorce parlamentarios elegidos en las elecciones generales a Cortes en proporción a los resultados obtenidos por las fuerzas políticas. El PSOE contará con seis consejeros regionales; UCD, con cinco; el PCE y Alianza Popular, con uno cada uno, y el senador Independiente, Corte Zapico, también con uno. A estos catorce consejeros se sumará un representante de la Diputación Provincial. Entre ellos elegirán un presidente, un vicepresidente y un secretario. Una vez celebradas las elecciones locales se procederá a sustituir al representante de la Diputación por catorce nuevos consejeros, que serán elegidos de entre los treinta diputados provinciales por ellos mismos y en proporción al número de diputados que tenga cada partido en la Diputación, garantizándose que todas las fuerzas representadas en la Diputación Provincial estarán, a su vez, representadas en el Consejo Regional. Todos los miembros del Consejo Regional tendrán iguales derechos y obligaciones para elegir y para ser elegidos para cualquier vacante que se produzca y, en su caso, la de presidente.

Con la aprobación del real decreto de la preautonomía asturiana por el Consejo de Ministros de anteayer se culmina un proceso iniciado el 11 de octubre de 1977, cuando la Asamblea de Parlamentarios asturianos asumió la propuesta del diputado socialista Luis Gómez Llorente de solicitar para Asturias un régimen preautonómico.

Apertura a la futura autonomía de Murcia

Sin ningún tipo de reacción popular, lo que se podría atribuir a la escasa conciencla regional y a las características del momento actual en que una buena parte de la población está de vacaciones. Ha sido acogida en Murcia la aprobación por el Consejo de Ministros del estatuto de preautonomía para la región. Con todo, tras dos meses de elaboración y cuatro de negociaciones en las que ha habido varios retrasos y, a raíz de las cuales el texto aprobado ha quedado bastante recortado, la preautonomía abre la primera puerta de la autonomía definitiva para una región uniprovincial y especialmente compleja como es la de Murcia.En el plazo de un mes habrá de constituirse el Consejo Regional que estará interesado antes de la celebración de las elecciones locales por los doce parlamentarios murcianos -siete de UCD y cinco del PSOE- más otros tantos representantes del territorio elegidos por los parlamentarios en la misma proporción y un representante de la actual Diputación Provincial. Una vez celebradas las elecciones locales el Consejo quedará compuesto por los doce parlamentarios junto a otros doce diputados provinciales en lugar de la totalidad de los mismos, como se había propuesto Inicialmente.

El Consejo Regional contará con un presidente y un secretario general. Para ocupar la presidencia se da como seguro el nombre de Antonio Pérez Crespo, diputado de UCD de la línea democristiana, aunque también se atribuye posibilidades al también diputado del mismo partido Joaquín Esteban, antiguo secretario del Gobierno Civil de Murcia. La secretaría general será probablemente ocupada por José Méndez, del PSOE, funcionario de la Delegación Provincial de Trabajo.

A raíz de la aprobación del decreto el señor Pérez Crespo ha manifestado que de acuerdo con su partido el número de carteras regionales que han de crearse debe ser de doce, a la vez que ha reafirmado su candidatura a la presidencia como «decisión firme del partido». Señaló además que en el Consejo deben participar, fundamentalmente, políticos que no sean parlamentarios. De la misma opinión, en este punto, es el diputado socialista Ciriaco de Vicente, quien ha manifestado a EL PAÍS su disconformidad con el retraso con queel Ministerio para las Regiones ha conducido la negociación y ha añadido que tiene mucha más importancia lo que se consiga en el proceso de transferencias que la mera constitución del Consejo Regional.

Entre las peculiaridades que presenta la región de cara a la futura autonomía figura su carácter histórico de Zona de transición atestiguada especialmente en el ámbito lingüístico junto a las fuertes diferencias socioeconómicas y culturales entre las distintas comarcas que la componen.