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Se aprueban créditos por 12.800 millones para apoyar al sector naval

El Consejo de Ministros estudió ayer un anteproyecto de ley que contempla la financiación inicial del sector naval y que supone uno de los tres pilares en que se apoyará la reestructuración del citado sector. El anteproyecto de ley supone un desembolso para el Tesoro, ya que se hará a través de créditos extraordinarios y oficiales, de 12.800 millones de pesetas.

El plan financiero para el sector naval se fija como objetivos básicos la corrección del déficit de las tres empresas afectadas -Astilleros Españoles, Astilleros del Noroeste y Bazán- y terminar con el deterioro de los fondos propios. En este sentido, cabe recordar que las pérdidas previstas para las tres empresas en 1978 alcanza los 9.500 millones de pesetas, mientras que los déficit financieros de cada una de las empresas se reparten de la siguiente manera: AESA, 17.000 millones, Astano, 3.600, y Bazán, 2.300 millones.El plan financiero de reestructuración naval contempla la ampliación de capital de Astilleros Españoles en 6.300 millones de pesetas y de Astano en 3.500 millones. Por otro lado, se otorga un crédito oficial a la Bazán por un total de 3.000 millones de pesetas. Como sea que los créditos extraordinarios deberán pasar por las Cortes, el Gobierno prevé la posibilidad de realizar un anticipo en tanto sean aprobados por el Parlamento.

La posibilidad de destinar 16.000 millones de pesetas a refinanciar la deuda de las tres empresas no ha sido abordado en el antreproyecto de ley ya que según la opinión generalizada entre los expertos, esta cifra no era considerada como absolutamente necesaria y se prevé que con las ampliaciones de capital y el crédito oficial a Bazán se clarifique el panorama a finales de 1979, fecha en la que habrá de adoptar una nueva estrategia.

Otro de los puntos estudiado por el Consejo es el referente a las medidas de apoyo a la demanda con objeto de facilitar el proceso de ajuste y conseguir la gradual reestructuración del sector. Estas medidas que son excepcionales y temporales, ya que su vigencia termina en junio del próximo año. van dirigidas especialmente al mercado interno y tienen como objetivo el mantener a la mano de obra.

En este sentido, el decreto contempla la creación de un esquema financiero que posibilite la compra de buques. Así, se concederán créditos al mismo tipo de interés que goza el crédito a la exportación. Se establece un esquema crediticio que cubrirá el 80% del valor del buque, y se fija un plazo de doce años con dos años de carencia. En opinión de los dirigentes del Ministerio de Industria, estas medidas serán suficientes para mantener la demanda en la medida que se considera necesaria. La cifra de créditos podría alcanzar los 50.000 millones de pesetas.

El tercer soporte del plan de reestructuración naval es el de la reducción de capacidad a través de la regulación de empleo. Esta parte del plan, según anuncio en su momento el ministro del ramo, señor Rodrísiuez Sahagún, persigue la reducción de la mano de obra en un 50% en los próximos cuatro años.

Administración y centrales sindicales han negociado punto por punto y centro por centro el reparto de esta regulación de mano de obra, resaltando en opinión de unos y otros la buena disposición y la seriedad con que se han llevado a cabo estas negociaciones.

De las reuniones mantenidas últimamente entre los implicados en la reestructuración naval, la primera conclusión es que los acuerdos base se están cumpliendo a rajatabla, dentro de las normales tensiones producto de la complejidad de los mecanismos previstos.

Por lo que respecta a Astilleros Españoles, pasarán a la situación de desempleo rotatorio, a partir del 1 de septiembre, un total de 2.400 trabajadores, cifra que se irá incrementando hasta alcanzar los 7.000 trabajadores en que quedará la plantilla al final del plan pactado inicialmente.

En Astilleros del Noroeste, el inicio de regulación de empleo se ha fijado en el 27 de septiembre, día en que pasarán al desempleo 1.600 personas de los más de 6.000 que configuran la plantilla

Por lo que respecta a la E. N. Bazán, en la que el INI cuenta con la totalidad de las acciones, el plan prevé básicamente jubilaciones anticipadas y supresión de la totalidad de horas extraordinarias. El número de trabajadores que pasarán al desempleo será mínimo debido a la especialización de la compañía y a la posibilidad de captar pedidos con mayor facilidad que el resto de los astilleros, ya que la construcción naval-militar, cuenta con un campo de acción mucho más amplio.

De acuerdo con las informaciones recogidas por EL PAIS, el coste de esta regulación de empleo, una vez en su pleno desarrollo, podría alcanzar los 4.000 millones de pesetas por año.

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