Las listas de Hacienda serán públicas

La enmienda socialista que propugna la publicación de las listas de los contribuyentes a la Hacienda Pública fue aprobada ayer por el Pleno del Congreso de Diputados, quie ha venido debatiendo, en sesión nocturna, el proyecto de ley del impuesto sobre la renta de las personas físicas. Este proyecto de ley, que consta de cuarenta artículos y varias disposiciones adicionales transitorias y finales, quedó finalmente aprobado en la sesión de ayer.

La enmienda del Grupo Socialista favorable a la publicación de las listas de Hacienda obtuvo 138 votos afirmativos, frente a trece negativos y 125 abstenciones. Entre los votos emitidos a favor de la enmienda socialista se contabilizaron el del Ministro de Hacienda, Francisco Fernández Ordóñez, y los de varios diputados de UCD, entre ellos el del portavoz de dicho grupo parlamentario, José Pedro Pérez Llorca.Se abstuvieron una Parte importante de los diputados de UCD y el grupo de la Minoría Catalana.

Daría una gran credibilidad

En la defensa de la enmienda socialista, el diputado de este grupo Baldomero Lozano puso de manifiesto que la publicidad de las listas de contribuyentes daría una gran credibilidad al actual sistema económico y político. «Se ha atacado -dijo- a esta enmienda diciendo que la misma afecta la intimidad de las personas. Efectivamente, en este caso existe una colisión entre el interés privado y el interés público, pero, como es lógico, este último debe primar sobre aquél, pues el dinero de todos debe ser conocido por todos.» El señor Lozano añadió que se dará un paso importante en la credibilidad de la Hacienda Pública si los ocho millones de contribuyentes españoles se convencen, a través de dichas listas, de que todos ellos han declarado con veracidad y con justicia.

En la explicación de su voto, el grupo parlamentario de UCD declaró que, a su juicio, existían en el proyecto de ley suficientes procedimientos para conseguir la transparencia fiscal, pero que, no obstante, no era opuesto a la publicación de las listas. El proyecto de ley preveía en su artículo 40, que ha sido modificado por la enmienda socialista, que las listas de los contribuyentes sólo podrían ser conocidas con fines exclusivamente parlamentarios por los diputados y senadores de las comisiones de Hacienda y Presupuestos de las Cortes.

Deducción elitista

Otras enmiendas socialistas presentadas a diversos artículos del proyecto de ley no obtuvieron, sin embargo, el mismo éxito. Por eje.mplo, la que pretendía suprimir un apartado del artículo 29, por el que se establece la deducción del 15% de las cantidades pagadas en razón de intereses de préstamos concertados con los particulares para la adquisición de acciones de la propia empresa para la que trabaja. Según el Grupo Socialista esta deducción tiene un carácter elitista, pues, en definitiva, premia a aquellos que tienen los sueldos más altos en las empresas, como son los cuadros y los directivos. En contra de esta enmienda y a favor del proyecto de ley intervino el diputado de la Minoría Catalana senor Trías Fargas. Este reconoció que, efectivamente, dicha deducción aportaba ciertas ventajas en el ámbito de la empresa a los de arriba, pero que entendía que constituía un mo,desto paso en lo que se refiere a la promoción de la participación de los trabajadores en el capital de las empresas que la propia Constitución reconoce.

Otra enmienda socialista que no obtuvo tampoco éxito fue la que pretendía que el sistema de evaluación de renta por los signos externos no fuera aplicable a las rentas inferiores al millón y medio de pesetas. A juicio del Grupo Socialista no pueden ser considerados hoy en día como signos externos de riqueza cosas tan elementales como la vivienda y el automóvil.

Enmienda de clase

UCD se opuso a esta enmienda calificándola de «enmienda de clase y de privilegio», cuya aprobación aceptaría a la recaudación de impuestos los socialistas replicaron que, efectivamente, esta enmienda era de clase, pues intentaba defender a las capas inferiores de la población, pues las otras ya se protejen bastante bien en lo que se refiere al pago de impuestos.

El partido gubernamental insistió de nuevo en su oposición a esta enmienda socialista afirmando que no se trata de oprimir a las gentes desamparadas, ya que en este proyecto de ley se ha cambiado la naturaleza de los signos externos. «Si se detecta un signo externo -precisó el diputado ucedista señor García Añoveros- se pone en marcha el correspondiente control administrativo. Este nunca va a obligar a pagar a nacie algo que no haya ganado, y el que tenga poca renta y no la haya ocultado puede estar tranquilo.»

Aprobados en bloque y sin debate

Al margen de la discusión de las citadas enmiendas social istas el resto de los artículos -diez en total- y de las enmiendas que quedaban por discutir fueron aprobados en bloque y sin apenas debate. En los artículos aprobados figura uno según el cual no estarán obligadas a declarar las persojias con ingresos inferiores a 300.000 pesetas anuales, computándose a efectos de este límite todos los ingresos de la unidad familiar. Otro de los artículos aprobados suprime cinco impuestos a partir del 1 de enero de 1979, entre ellos el de los rendimientos del trabajo personal.