_
_
_
_

Grave tensión social en Córdoba por el recrudecimiento de conflictos laborales

La tensión laboral se ha recrudecido de una forma ostensible en la provincia de Córdoba por la concurrencia de una serie de conflictos que en palabras del secretario provincial de CCOO, Ildefonso Jiménez, «son provocados voluntariamente por el caciquismo para boicotear el avance democrático.»

Más de medio centenar de expedientes de crisis han sido aceptados en lo que va de año por la Delegación Provincial de Trabajo, donde todo cuela, según dicho sindicalista, «bajo la argumentación de que es preferible ir a regulación de empleo perdiendo hoy los trabajadores su puesto en vez de que mañana lo pierdan más, cuando la realidad es que tras el despido de los primeros, al poco tiempo una nueva regulación sirve para cesar al resto».Desde el viernes, 42 trabajadores de LAM de Madera y Corcho se vienen constituyendo en encierro voluntario tras terminar su jornada laboral, ante el estado de suspensión de pagos y el expediente promovido por la empresa, que adeuda a los trabajadores, con una media de cincuenta años de edad y más de treinta años en plantilla, la paga de beneficios y el salarlo de las últimas semanas, en las que la empresa ha entregado sólo mil pesetas a cada trabajador. Han sido visitados en su encierro por el diputado comunista y vicepresidente del Congreso Ignacio Gallego, quien les ha prometido su apoyo incondicional.

Este conflicto ha venido a unirse a los que dentro del mismo sector mantienen Cadagua, con 55 trabajadores en crisis; Samper, de Villa del Río, con dieciocho despedidos tras cambiar varias veces de denominación, y Coosur, de La Carlota, con 35 cesados.

En otros sectores de la producción ya se ha aceptado la regulación de 55 trabajadores en Moreno, SA, fabricante de aceites y mayonesa Musa, que, en opinión de las centrales sindicales, está trasladando su actividad a los países hispanoamericanos en donde se protege el fascismo empresarial.

Asimismo, y por crisis de Pinturas Espinar, se ha legalizado el despido de 127 trabajadores, mientras que la semana pasada Construcciones Domínguez, subsidiaria de obras de Sevillana de Electricidad, tras impagar la Seguridad Social de varios años, que les ha sido detraída a los trabajadores, ha dejado en paro a toda su plantilla: medio centenar.

Incidencia en el sector agrario

Ayer el conflicto se significó especialmente en el sector agrario. En Palma del Río se produjo una gran tensión cuando una concentración de 150 jornaleros en paro vieron cómo la comisión que las centrales sindicales UGT y CCOO han designado para intervenir en la administración de los fondos del empleo comunitario, de acuerdo con el gobernador, fueron despedidos por tres veces de su despacho por el alcalde, tras reiterar que no había dinero para empleo comunitario nada más que para unos pocos jornaleros. Ante la situación acudieron fuerzas de la Guardia Civil de los pueblos próximos, lo que acentuó la tensión en el pueblo, que a última hora de la noche se congregó en una asamblea pública.En Adamuz, tras informar que sólo hay dinero para 95 trabajadores de los 260 parados, el alcalde rechazó el que el dinero se repartiera entre todos, y todos trabajaran, argumentando que «aquí el que manda soy yo y yo elijo los que van a trabajar». Ante esta postura, los trabajadores se dirigieron a sus puestos, en cuyas faenas ocuparon el día dispuestos a si es necesario exigir sus salarios ante Magistratura.

Ante este estado de tensión, el senador por el PSOE Joaquín Martinez Bjorkman, acompañado del secretario provincial de la Federación de Trabajadores de la Tierra (UGT), se entrevistó con el gobernador, al que pidieron solución inmediata a la situación de la provincia, prometiendo dicha autoridad evacuar las gestiones necesarias para que a partir de hoy los fondos alcancen a todos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_