Adelpha pide que se paralice la desamortización privada del arte sacro

La Asociación de Defensa Ecológica y del Patrimonio Histórico-Artístico (Adelpha) hizo público un comunicado ante el IV Cursillo de Conservación de Arte Religioso, dirigido, esencialmente, a la jerarquía de la Iglesia Católica y a la Administración Pública «para que se ponga fin a la desamortización privada del patrimonio sacro. Por otra parte, señala el enunciado del documento, Adelpha denuncia la actitud antisocial de determinados círculos de la iglesia que, calificando el desarrollo de la ley del Suelo de "desamortización encubierta", pretenden una vasta operación especulativa».«Adelpha se dirige a la Conferencia Episcopal y a todas las jerarquías eclesiásticas, así como a la Administración Pública, y en especial a las comisiones encargadas de la fijación de las nuevas relaciones entre España y la Santa Sede, al objeto de precisar, una vez más, y con motivo del IV Cursillo sobre conservación de arte religioso que dió comienzo en Madrid el día 20, el punto de vista de esta asociación frente al tema del Patrimonio Histórico-Artístico de la Iglesia Católica en España.»

«Cara a las negociaciones con la Santa Sede -continua la nota-, Adelpha insiste, una vez más, en la necesidad de que se mantenga y subraye el carácter jurídico-público que siempre ha tenido en España el Patrimonio Histórico de la iglesia, que constituye un conjunto de bienes nacionales tanto en el plano jurídico como en el histórico-sociológico, En este sentido, Adelpha expresa su más enérgica protesta por el informe publicado en la revista Claune y en el que se invita a las órdenes religiosas a interponer alegaciones y recursos contra los planes generales que resulten de la aplicación de la ley del Suelo, planes que la indicada revista califica de "desamortización encubierta". Frente a esta pretendida desamortización se está planeando una vasta operación especulativa consistente en dejar sin ninguna protección jurídica los inmuebles eclesiásticos, con las gravísimas consecuencias que sobre el Patrimonio Artístico Nacional podría tener dicha pretensión en el caso de prosperar. Adelpha sostiene que los bienes inmuebles de personas eclesiásticas deben estar sujetas a las mismas limitaciones que los de propiedad privada y los pertenecientes a la Administración cuando concurran en ellos especiales condiciones de naturaleza artística, histórica o ambiental, sin que puedan estas limitaciones ser consideradas una "desamortización encubierta" en ningún estado de derecho preocupado por los intereses públicos, entre los que no cabe postergar los relativos al Patrimonio Cultural de la nación. Adelpha entiende que, en contra de la tesis de la supuesta "desamortización encubierta", lo que verdaderamente está sucediendo es una verdadera, lamentable e ilegal "desamortización privada cuya superación no debe hacerse esperar. La razonable postura de algunas diócesis, particularmente conscientes de su responsabilidad histórica y jurídica para con el patrimonio del que son depositarias, marca el camino al que tiene que reconducirse el tratamiento de esta delicada problemática.»