Aparece una pistola relacionada con el atentado armenio

El primer ministro turco, Bulent Ecevit, dio ayer, desde Nueva York, instrucciones a su Gobierno para que se disponga de un avión especial de la fuerza aérea turca que traslade a Ankara los cadáveres de la embajadora de Turquía en España, Nelka Kuneralp, y de su cuñado, el ex embajador en Suecia, Besir Balcioglu, asesinados junto al chófer español Torres Olmedo por un comando, presumiblemente armenio, el pasado viernes en Madrid.

Mientras el Gobierno turco solicitaba ante la ONU que los Gobiernos de los países miembros ordenen precauciones extraordinarias de seguridad en favor de los representantes de Turquía en el extranjero, fuentes policiales de Madrid confirmaban el hallazgo de una pistola, marca «Beretta», en la calle Rafael Calvo, con la que presuntamente se realizó el ataque contra el automóvil diplomático en el que viajaban los asesinados.Hasta el momento, ésta parecía ser la única pista concreta que las investigaciones policiales en torno al atentado han conseguido. En este sentido, fuentes policiales constataban la sospecha de que el grupo terrorista, presumiblemente extranjero, que realizó el atentado, se encuentre todavía en Madrid. El grupo, según las mismas fuentes, estaba formado por sólo tres jóvenes, cuya edad no superaría los veintiún años.

La policía mantuvo ayer, durante casi toda la jornada, los controles impuestos en carreteras, aeropuerto, estaciones y diversos puntos de la ciudad. Asimismo, la policía interrogó a numerosos extranjeros residentes en Madrid que, por su nacionalidad, podrían guardar relación con la causa armenia.

Mientras, noticias procedentes de Ankara confirman que, mientras se presume que el objetivo del grupo terrorista era el embajador turco acreditado en Madrid, no se tiene ningún indicio de que hubiese sido previamente amenazado. No sucede lo mismo con el embajador turco en Bélgica, que durante las últimas semanas recibió varias amenazas de muerte por parte de grupos de activistas armenios.