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Los "cascos azules" franceses suspenden sus operaciones de vigilancia en el sur de Líbano

ENVIADO ESPECIALEl contingente francés de las Fuerzas de las Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha suspendido la mayoría de las patrullas en el sector de Tiro, donde el martes se produjo un grave enfrentamiento con comandos palestinos, mientras duran las conversaciones para tratar el problema de las infiltraciones de los guerrilleros hacia el Sur. Mientras tanto, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó el envío de 2.000 hombres más al sur de Líbano, que se unirán a los 4.000 soldados estacionados ya en la zona.

Parapetados tras sacos terreros, protegidos por chalecos antibala, y vigilando constantemente los naranjales con sus prismáticos, los paracaidistas franceses de la FINUL (Fuerzas de la ONU en Líbano) muestran la tensión de los serios choques ocurridos entre ellos y los guerrilleros palestinos.«La culpa de lo que pasa no es la falta de medios militares, sino de decisiones políticas», dice un oficial francés del puesto de control en la carretera de Tiro a Israel, visiblemente indignado.

«Tenemos -añade- dos muertos y siete heridos, entre ellos nuestro coronel. Al coronel Salvan le han metido diez tiros en el cuerpo, y eso no puede ser accidental; han intentado eliminarlo porque era el único que sabía lo que había que hacer aquí. También le han metido un tiro en la cabeza al oficial que mandaba la patrulla que mató a dos guerrilleros al principio de los acontecimientos.»

Sólo a unos cientos de metros de la posición de los «paras» hemos encontrado un comando palestino de quince hombres ocultos en una granja, entre naranjos. «Nos movemos continuamente y nadie puede impedirnos pasar las líneas de las FINUL -dicen-.Nosotros hemos mantenido posiciones más allá de donde están ahora los franceses durante la invasión israelí, porque el terreno nos permitía escondernos y hostigar sus retaguardias, y no vamos ahora a renunciar a esas posiciones.»

El choque resistencia-FINUL revela las disensiones existentes en el seno de la OLP. Arafat había prometido su colaboración en la misión de la ONU, lo que ha sido vivamente contestado por los sectores palestinos más radicales. Un portavoz del FPLP ha dicho que los franceses «son neocolonialistas, y les hemos dado una buena lección». Mientras que la agencia de prensa de la OLP habla de las «provocaciones del contingente francés», puede pensarse en un intento de los radicales de envenenar las relaciones FINUL-OLP, lo que explicaría el serio bombardeo sufrido por el cuartel francés y la emboscada tendida al coronel Salvan, en la que, por cierto, ha muerto el oficial de la OLP que le acompañaba para facilitarle la tarea.

Sin embargo, el coronel fue salvado gracias a la intervención palestina, pues fue una ambulancia de la Media Luna Roja palestina (dirigida por el doctor Arafat, hermano de Yaser Arafat) la que le llevó al hospital Gaza de la OLP, en Beirut, donde fue operado de urgencia. Aparentemente fuera de peligro, el coronel Salvan ha sido trasladado a la UVI del hospital francés de Beirut.

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En el fondo del problema, lo que se cuestiona es el mismo papel de las FINUL en Líbano. Si no permiten el tránsito de grupos armados por su zona de ocupación se convertirán en un cuerpo defensivo israelí. Si lo permiten funcionarán como aliados tácticos de la resistencia. Las FINUL están, pues, siendo sometidas a un test. De momento se han replegado, han suspendido la mayoría de las patrullas y han devuelto dos prisioneros palestinos que tenían.

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