Alfonso Soriano: "La victoria de los liberales de UCD se hubiera logrado aun sin el apoyo del PSOE"

Pregunta . Un grupo de parlamentarios de UCD de Las Palmas, con el apoyo del comité provincial del partido, pretende impugnar judicialmente la constitución de la Junta. ¿En qué medida afecta esto al funcionamiento de la preautonomía canaria?Respuesta. Respeto plenamente cualquier impugnación por parte de personas con capacidad para hacerla, pero considero que la Junta de Canarias ha sido válidamente constituida. De un total de treinta personas -cuatro se habían salido y el representante del PCE estaba ausente-, yo tuve veintiséis votos, tres fueron nulos y hubo una abstención, que fue la mía. Me parece una votación lo suficientemente clara como para disipar cualquier duda sobre su validez.

P. Hasta el momento, el enfrentamiento entre los hombres de la UCD canaria se ha explicado como una lucha interprovincial o como la implantación de un sector del partido sobre el otro. ¿Qué hay de cierto en ello?

R. Niego rotundamente que sea una lucha interprovincial dado que el equilibrio es total. El vicepresidente de la Junta, el socialista Saavedra, es de Las Palmas; el secretario, también, y la sede del consejo permanente está en Las Palmas, por lo que en todo caso podría hablarse de una situación preferente para esta provincia. Lo que ha pasado es que en lugar de estar determinadas personas de Las Palmas, que son las que llevan la contestación, están otras. En cuanto a la lucha de ideologías dentro de UCD, tampoco es exactamente eso. Yo me presenté como candidato a la presidencia al tener el apoyo del comité provincial de la UCD de Tenerife, que está compuesto por veintiún miembros procedentes, por partes, iguales, por liberales, socialdemócratas y demócratacristianos; a mí me apoyan dieciocho de esos miembros. Mal se puede hablar en Tenerife de una lucha ideológica en el seno de UCD. En cuanto a Las Palmas, dos de los parlamentarios que han sido excluidos de la Junta provienen del Partido Demócrata Popular, que dice ser liberal.

P. El equilibrio por islas se ha respetado, pero los socialdemócratas de Las Palmas han sido sustituidos por liberales. ¿No es cierto? .

R. Ha habido una imposición de liberales sobre socialdemócratas en líneas generales, pero si hubiera triunfado el grupo de Bergasa hubiera sucedido lo contrario.

P. Lo que a los liberales les reprochan los socialdemócratas es haberse apoyado en el PSOE para desbancarles.

R. Esta operación hubiera salido, incluso, sin el apoyo del PSOE. Los pactos con este partido y el resto de ellos fueron negociados en nombre de UCD por Bergasa y Bravo de Laguna. En ellos se estableció que la vicepresidencia y dos consejerías fueran para el PSOE. Nosotros hemos cumplido estrictamente estos acuerdos. Por otra parte, el apoyo del PSOE a los liberales entra en contradicción con el supuesto conservadurismo que se nos atribuye.

"Por desgracia, no tengo propiedades en Canarias"

P. Según sus manifestaciones no se han roto pactos con otros partidos. ¿Se ha roto acaso algún pacto, interno de UCD?

R. No se ha roto pacto alguno. UCD no tiene de momento estructura regional, sino provincial. El senador Diego Cambreleng envió hace un mes una carta a Bergasa instándole para una reunión de los parlamentarios canarios de UCD en orden a la constitución de la Junta, y no hubo respuesta. Entonces fue cuando el comité provincial de Tenerife decidió reunirse al objeto de proponer un candidato de UCD por esta provincia, y acordó proponerme a mí. Fue entonces cuando Bergasa indicó que tenía que haber un candidato regional único para la presidencia de la Junta. Esto era quitarle todo el papel a los demás partidos, y entendimos como más democrático presentar dos o incluso más candidatos porque el presidente tendría así mucho más respaldo regional.

P. También se quejan los socialdemócratas del alto precio que han pagado los liberales por su éxito al entregarles a los socialistas las mejores consejerías.

R. En mi opinión, todas las carteras son igualmente importantes. En algún caso, como el de la consejería de Sanidad, en el socialista Alberto de Armas se encontraba la persona indicada por su condición de médico de gran prestigio.

P. Después del famoso debate parlamentario entre UCD y el PSOE por el acuerdo pesquero con Marruecos, ¿no deja de ser una Ironía que esta cartera vaya a parar a manos de los socialistas?

R. En absoluto. Repito que todas las carteras son importantes.

P. Desde algún sector de la Izquierda se está presentando el problema de UCD como una lucha entre caciques, institución con raigambre en el archipiélago.

R. Gracias a Dios hoy, en Canarias, quedan muy pocos caciques y terratenientes. En Tenerife, desde luego, no los hay. Me ha sorprendido leer en la prensa que el PTE me tacha de cacique reaccionario, me denomina marqués de Celadas y uno de los mayores terratenientes. El marqués de Celadas es un tío mío y, por desgracia, no sólo no soy terrateniente, sino que no tengo propiedad alguna en las islas. Donde puede estar el auténtico caciquismo es quizá en las dos personas que controlan los dos diarios de más tirada de Las Palmas y suficientemente conocidas para que el pueblo los identifique sin necesidad de ponerles etiquetas.

P. ¿Le inquieta el expediente de expulsión que se ha abierto a sus compañeros de la tendencia liberal por parte del comité provincial de UCD de Las Palmas?

R. Repito que la estructura de UCD es provincial y yo no quiero juzgar situaciones que competen al comité de Las Palmas, pero entiendo que las reacciones de señores que no han sido elegidos dice muy poco de su talante democrático. Creo que al final se impondrá la cordura y la sensatez.

P. Usted sabe que por lo menos cuatro parlamentarios socialdemócratas amenazan con irse de UCD si no son expulsados los liberales.

R. Están en su derecho.

P. ¿Su derecho puede ser expulsar a sus oponentes?

R. No, su derecho es pedirlo.

P. ¿Qué piensa Suárez de todo esto?

R. No tengo idea. Yo creo que se ha mantenido ajeno y que son niveles inferiores a él los que han querido complicar la situación.

P. ¿Ha recibido usted muchos telegramas de felicitación? En concreto, ¿los ha recibido de las altas instancias del partido y del Gobierno?

R. He recibido muchos telegramas de Canarias y una cordial felicitación del Rey. Yo, el mismo día de mi elección, envié dos telegramas a Adolfo Suárez, uno como presidente del Gobierno, para ponerme a su entera disposición, y otro como presidente de UCD, para expresarle mi total lealtad.

P. ¿Ha contestado el presidente a estos telegramas?

R. Todavía no.

P. ¿Comenzar a trabajar en medio de esta polémica es un hándicap grave para la Junta de Canarias?

R. Mejor hubiera sido empezar a trabajar sin estos obstáculos iniciales, pero la opinión pública se dará cuenta de la realidad de los hechos. El diario Las Provincias, de Las Palmas, ha instado a los ayuntamientos canarios a que no reconocieran a la Junta. Sin embargo, debo decir que ese llamamiento no ha sido secundado. Hemos sido cumplimentados por el alcalde y por el pleno del Cabildo de Las Palmas. Todo el mundo sabe en las islas los nombres de los que están detrás de esta campaña.

P. ¿Ha sido informada la Junta oficialmente del viaje del presidente a Canarias?

R. Del viaje del presidente a Canarias no sé nada, pero estoy a la espera de entrar en contacto con el Gobierno. Tal vez esta situación se deba a que la Junta de Canarias no ha sido todavía formalmente constituida. Espero, de todas formas, que se cuente con ella y se le dé el rango que le corresponde como máximo ente regional, y a mí, el que me corresponde como presidente de ese organismo.

"Suárez no viene a pasearse"

P. Como presidente de la Junta, ¿qué espera del viaje del presidente del Gobierno?

R. Estamos atravesando un momento muy difícil, pero creo que, con la capacidad del presidente Suárez y su probada eficacia, su viaje no será un paseo por las islas como los que han venido efectuando todos los altos cargos que por aquí pasaban.

P. ¿Cómo describiría usted la problemática a la que deben enfrentarse el Gobierno y la Junta a corto plazo?

R. Desde el punto de vista internacional, el archipiélago canario se ha convertido en un punto conflictivo. La pérdida del Sahara ha influido directa y negativamente sobre el archipiélago, pero no existe duda alguna sobre su españolidad. Son muy minoritarias e infundamentadas las posturas independentistas. Desde el punto de vista interno, el problema más grave proviene de la superpoblación de las islas, el cierre de la emigración y la falta de puestos de trabajo. Si tenemos en cuenta que su economía está basada en la agricultura y el turismo, salta a la vista que es urgente el establecimiento de una industria de transformación y la ayuda por parte del Estado a la pequeña y mediana e incipiente industria canaria. Creo que, en este sentido, la aprobación de la ordenanza de la tarifa especial para los productos manufacturados canarios será muy saludable para la economía del archipiélago.