Dimitió el Gobierno tecnocrático libanés

El primer Gobierno de la posguerra civil libanesa dimitió ayer en medio de la polémica creada la semana pasada por los combates librados entre milicianos derechistas y soldados de la fuerza de pacificación siria que pusieron fin a la guerra, informó oficialmente radio Beirut.La dimisión -no obstante preverse a raíz de las informaciones aparecidas en la prensa local de unos días atrás a esta parte- parece producirse por sorpresa. El primer ministro, Selim Al-Hoss, tenía previsto reunirse con periodistas extranjeros en una comida de rutina, pero canceló la cita en el último momento.

Hoss y su Gobierno de tecnócratas accedieron al poder ejecutivo hace diecisiete meses tras otros diecinueve de guerra civil entre cristianos y una coalición musulmana de izquierdistas libaneses y palestinos.

Desde entonces ha trabajado sin descanso -pero, al parecer, con poco éxito- para establecer un «entendimiento nacional» destinado a acabar con las fricciones que originaron el conflicto bélico.

Hoss y el presidente Elias Sarkis han sido víctimas de ataques críticos procedentes de todos lados en su busca de un entendimiento nacional, a pesar de los repetidos ruegos por parte de los bandos rivales en la guerra civil para que se respetara la «autoridad legítima» del país.

La tensión política aumentó la semana pasada cuando los milicianos cristianos se enzarzaron con los soldados de las fuerzas sirias de pacificación en el segundo combate ocurrido en los dos últimos meses.

El Gobierno había encomendado a los sirios la misión de poner fin a las fricciones cristiano-musulmanas, pero las luchas se convirtieron prontamente en una batalla sirio-cristiana.

Los líderes cristianos censuraron duramente al Gobierno por ordenar la intervención de los sirios y pidieron explicaciones oficiales.

Hace tres días, Hoss ofreció su «dimisión, si ésta arreglara las cosas», según informó el diario An Nahar. Hoss desmintió esta información, pero altas fuentes gubernamentales declararon que era cierta.