"No tiene sentido el enfrentamiento entre pequeña y gran empresa"
La crisis económica y empresarial, las relaciones entre pequeña y mediana empresa y gran empresa y banca, la integración en Europa, las limitaciones a la distribución de dividendos a los accionistas y el ejercicio del banco, constituyeron los temas centrales del informe del presidente del Banco Central, Alfonso Escámez, a sus accionistas en la junta general de la entidad celebrada ayer.Los resultados del ejercicio fueron ya avanzados por el señor Escámez a la prensa en una reunión que tuvo reflejo en estas páginas el pasado viernes. Como datos complementarios pueden señalarse que, la renta neta generada en el ejercicio asciende a 22.700 millones, que se distribuyen de la siguiente forma: 3.700 millones aportados al Estado en forma de impuestos, 14.000millones a los trabajadores, 2.000 millones a los accionistas como dividendo y 3.000 millones a las reservas del banco.
En el turno de ruegos y preguntas intervinieron varios accionistas que insistieron en la necesidad de levantar el bloqueo de reparto de dividendos (6 % sobre capital y reservas) impuesto por ley de 1940 así como las limitaciones impuestas por los recientes decretos de control de dividendo.
A un accionista que recordó las palizas dadas por los españoles a árabes y franceses y, hace cuarenta años a otros españoles, y que señaló que si Carrero Blanco viviera no estaríamos como estamos, el señor Escámez retiró el uso de la palabra por no centrarse en los temas del orden del día.
Del discurso del señor Escamez destacamos algunas de sus afirmaciones más importantes:
- El ahorro y la empresa han sido el motor del país, su fuerza creadora, el cauce del sacrificio y esfuerzo colectivo.
- Sólo nuestro esfuerzo nos permitirá salir de la crisis. Hay que definir los sacrificios que cada uno debe asumir y fijar objetivos claros que devuelvan la confianza y credibilidad perdida.
- No tiene por qué existir enfrentamientos entre pequeñas o medianas empresas y grandes. Ambas se complementan y la crisis las afecta por igual.
- No ha existido una política clara para estimular la inversión ni el ambiente creado por las fuerzas sociales y políticas ha dejado margen de comprensión. Por el contrario, se cuestiona la empresa
- La actuación de la banca en el mundo empresarial ha sido más una servidumbre que un privilegio.
- La banca debe estar, en todo caso, en las grandes iniciativas.
- Europa es un objetivo, y para entrar en ella hemos de ser un país fuerte, sólido y equilibrado que se haga respetar.
- Hay que conseguir la supresión de las limitaciones al reparto de dividendos.
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