"El cristiano debe defender los valores fundamentales"
«El cristiano tiene la obligación de admitir y defender los valores fundamentales en cualquier hipótesis política o social», afirma el cardenal Tarancón en el curso de una carta cristiana titulada El cristiano y las ideologías.Estos valores fundamentales son para el cardenal Tarancón los siguientes: la dignidad de la persona humana, creada a imagen y semejanza de Dios; la caducidad de los bienes de la tierra, que deben de subordinarse siempre a los valores espirituales y a la dignidad de la persona; la convivencia fraterna y la auténtica solidaridad entre los hombres y la trascendencia de la vida humana que no puede encerrarse en el tiempo.
El cardenal Tarancón afirma que «actualmente, en España, el cristianismo y la Iglesia se han declarado independientes de toda ideología temporal. La jerarquía ha tenido interés en subrayar que cada cristiano debe actuar en ese campo según los dictados de su propia conciencia, ya que el pluralismo entre los cristianos -en el orden político, económico y sindical- está siendo para muchos causa de desconcierto, de confusión y hasta de escándalo, porque aparece, no pocas veces, desdibujada la misma identidad cristiana».
«El pluralismo no es malo. Casi se puede afirmar que es conveniente y hasta necesario. ¿Pero no se correrá el riesgo de filtrar la doctrina a través de las distintas ideologías pretendiendo conformar el cristianismo con cada una de ellas, según la opción que haya tomado cada cristiano?».
Añade que «el cristianismo tiene una concepción del hombre y del valor de los bienes espirituales y tiene una visión de la sociedad que ha sido querida por Dios en beneficio de la persona humana».
