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El número tres del PSUC de Tarragona abandona el partido

El abogado tarraconense Rafael Nadal, número tres de la lista de candidatos a diputado por Tarragona del Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) decidió abandonar dicho partido, del que era, sin duda, una de las figuras más destacadas en las comarcas de Tarragona. Nadal manifestó a EL PAIS que su postura «no es debida a razones ideológicas, sino de método». Agregó que el PSUC «funciona en base a esquemas y yo entiendo que se ha de trabajar a partir de la realidad». Nadal manifestó que últimamente se habían producido bajas de destacados militantes del PSUC en Tarragona

Rafael Nadal cuenta con 61 años. Actuó en muy numerosas ocasiones ante consejos de guerra. Asimismo, fue el primer abogado catalán que consiguió sentar en el banquillo de acusados a cinco miembros del Cuerpo General de Policía, acusados de torturas.La salida del PSUC de Rafael Nadal se enmarca dentro de la crisis organizativa del PSUC en Tarragona y particularmente en Reus, localidad donde el pasado mes de octubre setenta militantes del PSUC entregaron conjuntamente sus carnets del partido a Gregorio López-Raimundo, actual presidente del PSUC, en ocasión de una visita a aquella ciudad. Entre los dimisionarios se encontraba Agustí Solé Barberá, hermano del diputado comunista por Tarragona Josep Solé Barberá. Muchos de los dimisionarios ingresaron en el Partido Socialista Popular de Cataluña.

Militantes del PSUC de aque llas comarcas entregaron hace unos meses al delegado de EL PAIS en Cataluña un detallado informe mecanografiado sobre sus quejas a la dirección comarcal y provincial, al tiempo que, al igual que ahora Rafael Nadal, manifestaban que ideológicamente nada les separaba del partido, ya que solamente discrepaban por razones organizativas y ante la personalidad de los dirigentes comarcales y provinciales.

Un enviado especial de EL PAIS comprobó efectivamente que existían razones para criticar la situación organizativa creada después de la legalización del PSUC. Las críticas, en Reus, se dirigían contra los dirigentes Josep Colomé -actualmente del comité central-, Enric Aiguadé y Francesc Campoy, mientras que los militantes de Tarragona criticaban el clan de Javier Heras -responsable local que tiene a su esposa y a su hermano en el comité local de Tarragona del PSUC-, así como a Josep M. Pardell y a Matías Vives, este último del secretariado del comité central. Como telón de fondo aparecía la figura del histórico Josep Serradellm.

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