La creación de nuevos mercados exteriores para la industria del calzado, tema prioritario
Un total de 720 expositores participan en el 29 certamen de la Feria Internacional del Calzado y Afines (FICIA), que actualmente tiene abiertas sus puertas en Elda. La mayor presencia se debe al mercado nacional, con 650 expositores, procediendo los otros setenta de veinte países.
La repercusión económica que la celebración de este certamen pueda tener en el sector es importante, por las ofertas y compras que en el mismo puedan realizarse.
En 1977 las exportaciones de calzado descendieron, aunque el valor de lo exportado alcanzó los 36.000 millones de pesetas (unos quinientos millones de dólares). Según las estadísticas del Instituto Español del Calzado, tras varios años de exportaciones ascendentes se ha llegado en 1977 a un descenso en las ventas de siete millones de pares. Los países que han acusado este descenso de compras del zapato español son los que tradicionalmente han ofrecido mejores mercados, Estados Unidos y los países de la CEE, de éstos principalmente Alemania Federal, Francia y Reino Unido.
Si las ventas al exterior han disminuido, otro tanto ha sucedido en el mercado nacional. Todo ello repercute notablemente en el sector, calculándose que en el pasado año unos 4.200 trabajadores del calzado perdieron sus puestos de trabajo, como consecuencia de esta recesión. De ahí el interés de los directivos de FICIA y de los empresarios del sector por mantener las tasas exportadoras, ya que como señaló el director general de la feria «cada millón de pares que se deja de exportar significa que hay quinientos obreros de paro».
Nuevos mercados
Se observa un intento de dirigirse hacia los países del Este, y ejemplo de ello sería la reciente visita de una delegación comercial rusa a Elche y Elda o los protocolos que en breve va a firmar el centro promotor de exportaciones (Cepex), organismo vinculado a FICIA, con Hungría por valor de 750.000 dólares, con posibilidad de ampliarlo al millón de dólares, y con Checoslovaquia por 600.000 dólares. También la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE) intenta afianzar su presencia en los mercados extranjeros, como lo demuestra su presencia en las ferias de Francfort (donde participó con 72 expositores) y en la de Nueva York (donde estuvieron 42 empresas de la patronal zapatera), teniendo previsto para este año acudir a veinticuatro ferias, así como realizar cuatro misiones comerciales, la más inmediata de las cuales es a Japón, para hacer estudios de mercados.Un primer obstáculo es el posible proteccionismo de los países comunitarios frente a las importaciones de calzado. En este sentido se espera con interés la que ya se ha denominado cumbre europea del calzado, que, a instancias de la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), tendrá lugar mañana en Alicante.
El objetivo de esta reunión es analizar los problemas del calzado europeo en general, las medidas tomadas en los mercados norte americanos contra el calzado europeo, establecer investigaciones a nivel industrial, así como llegar a una colaboración dentro de los campos comerciales.
En este panorama de. proteccionismo contra las importaciones de calzado -primero fue Estados Unidos, ahora son los países europeos de la CEE-, se sospecha que Nigeria pudiera intentar adoptarlas en el futuro. En la actualidad, Nigeria es el séptimo cliente en importancia del sector del calzado y el primero de los países africanos. Sus compras de calzado español han aumentado considerablemente en los últimos años, calculándose que en 1977 se exportaron zapatos por valor de 1.100 millones de pesetas, cuando en 1974 la cifra era de veintiocho millones de pesetas.
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