Radicalización de la huelga de hostelería de Navarra

José Luis Lapeña, trabajador del café Iruña, de Pamplona, que había ingresado en prisión como presunto miembro de un piquete que el pasado sábado rompió varias lunas en un establecimiento hostelero, fue puesto ayer en libertad a media mañana, ya que, al parecer, en ningún momento actuó junto a los piquetes.

Por otra parte, una delegación de los trabajadores del sector en huelga se entrevistó el lunes con el subdirector general de Trabajo señor Barrionuevo, así como con el presidente de la Federación Provincial de Empresarios de hostelería de Madrid, Jesús Sáez, con vistas a encontrar una solución a la huelga del sector que se prolonga desde hace 34 días.

Contacto

En opinión de los trabajadores, el subdirector general de Trabajo se ha comprometido a contactar con el delegado de Trabajo de Navarra, ya que «existe una gran preocupación por este tema a nivel de las altas esferas oficiales».Sin embargo, la huelga ha entrado en una fase de radicalización de las posturas, al negarse la comisión negociadora de los grandes empresarios a tener ningún tipo de negociación en la que se incluya la readmisión de los 53 últimos despedidos. Incluso la agrupación de pequeños empresarios de hostelería de Navarra ha denunciado la actuación de aquéllos, por considerar que la postura que han adoptado puede tener consecuencias totalmente negativas para el sector hostelero. Hasta tal punto que la huelga de los trabajadores de hostelería podría acarrear paros en diversos sectores en señal de solidaridad.

A media tarde de ayer, los huelguistas comenzaron una asamblea en los locales de la AISS en la que se les informó de las últimas gestiones realizadas en Madrid. De momento no se espera un cambio de actitud con respecto al paro, que hoy cumple 34 días.