Cambio gubernamental frente a las elecciones

«La tesis gubernamental de desentenderse de la marcha de las elecciones sindicales bajo pretexto de «no intervención», va a variar de rumbo. Sin comprometerse a ninguna homologación oficial, el Ministerio de Trabajo, al disponer de las actas de todas las mesas electorales, proporcionará, sin duda, una información numérica más aséptica. Implica también esta actitud colaboradora de Jiménez de Parga, el encajar con espíritu democrático las censuras de la prensa, una posible aceptación del actual proceso electoral como «elecciones generales» y no excepcionales ni transitorias.En este caso, el Gobierno podría retirar de su proyecto de ley sobre Acción Sindical en la Empresa, el artículo que habla de convocar otras elecciones en el plazo de tres meses y limitarse a convalidar las actuales. Con ello ahorraría no sólo tensiones entre los trabajadores, sino también los millones de pesetas que supone para el empresario la pérdida de horas laborales en unas nuevas votaciones.»