Los parlamentarios andaluces confían en un próximo acuerdo

Los acuerdos adoptados por los comités provinciales de UCD de Andalucía en su reunión de Córdoba han desatado una serie de opiniones encontradas sobre los efectos que los mismos pueden tener en la ya de por sí problemática marcha de las negociaciones preautonómicas de esta región.La preautonomía andaluza quedó empantanada ante la negativa del Gobierno a aceptar que la iniciativa de presentación de candidatos a la presidencia de la Junta General de Andalucía sea facultad exclusiva del grupo mayoritario y que en tanto no se celebren las elecciones municipales, los representantes de las diputaciones queden privados del derecho de voto.

Estos acuerdos, que fueron aprobados por aclamación en la última reunión de la Asamblea de Parlamentarios andaluces, celebrada en Sevilla, son ahora ignorados por los comités provinciales de UCD, que además plantean de nuevo la cuestión de Ceuta y Melilla, tema que fue orillado en la fase primera de la negociación en el mes de octubre del pasado año.

Rodríguez Alcalde (UCD) considera que la posición actual de su partido no vulnera los acuerdos unánimes de la Asamblea de Parlamentarios. «Creo que se debe entender -afirma- que el pronunciamiento de la Asamblea en Sevilla no ha sido definitivo, sobre todo cuando en el tema de presidente la comisión negociadora había exigido del Gobierno un tratamiento idéntico al del País Vasco.» Respecto al rechazo de un régimen presidencialista en Andalucía afirma que «no queremos un Tarradelas; entendemos que el presidente debe tener carácter representantivo y no efectivo». Finalmente opina que los acuerdos de Córdoba no suponen un retroceso en el camino preautonómico, ya que en lo que afecta a la declaración de Ceuta y Melilla se trata de un «recordatorio al carácter andaluz de ambas ciudades».

Rafael Vallejo (PSOE) ha manifestado a EL PAÍS que las cosas comenzaron a rodar mal cuando después de los acuerdos de Sevilla algunos parlamentarios -los de UCD y PCE- «defendieron posturas distintas a las mantenidas en aquella asamblea». «Ahora UCD introduce elementos nuevos de distorsión en el camino del régimen provisional: por una parte, se desentierra el tema de Ceuta y Melilla y, por otra, se rechaza el artículo 128 de la Constitución, que habla de las nacionalidades, y lo hacen cuando estamos tratando el tema de Andalucía.» Sin embargo, el PSOE andaluz se muestra confiado en un próximo acuerdo.

Por su parte Ignacio Gallego (ME) estima que el pronunciamiento de UCD sobre Ceuta y Melilla «es un problema interno de ese partido». El señor Gallego está convencido de que se trata más que nada de una declaración testimonial.

«Me interesa dejar constancia -dice al respecto- que los comunistas nunca hemos estado en contra de la población de Ceuta y Melilla, sino que estimamos que su problema es un problema de Estado, no sólo de Andalucía. »

El diputado comunista por Sevilla se mostraba ayer optimista sobre los resultados del próximo encuentro con el señor Clavero, ya que estima que la oferta del Gobierno en la última entrevista es aceptable. En aquella ocasión, el señor Clavero aceptaba el compromiso de respetar los resultados de las elecciones del 15 de junio, ya que admitía que el presidente de la Junta fuera elegido entre parlamentarios, sólo por los parlamentarios (se excluye el voto de los representantes de las diputaciones) y por mayoría simple.