Juan Carlos: "Hay que evitar la politización de las Fuerzas Armadas"

El Rey felicitó ayer, con motivo de la Pascua militar, a las Fuerzas Armadas por su disciplina, calma y presencia de ánimo ante la transformación política que ha experimentado España en los dos últimos años, al mismo tiempo que les expresó su agradecimiento y el del pueblo español, «del que -dijo- procedéis y al que servís». El acto de felicitación se celebró en el salón del trono del Palacio Real de la plaza de Oriente ante representaciones de todas las instituciones militares y ante el Gobierno en pleno.

Don Juan Carlos pidió a las Fuerzas Armadas perseverancia en esa conducta e hizo una llamada a su compresión, serenidad y confianza para adaptarse a los cambios producidos, porque «el inmovilismo sería absurdo y suicida». «Igual que el arte de la guerra -dijo el Rey- tiene que sufrir innovaciones profundas, también en otros muchos aspectos, y desde luego en el político, hay que seguir la marcha de la Historia para demostrar al mundo y demostrarnos a nosotros mismos que somos capaces de vivir en paz, en la democracia y en la libertad.»Don Juan Carlos, que exigió a los demás respeto hacia los militares, a quienes «se les exige mucho y se les limitan sus actividades en el aspecto político», declaró que «hay que evitar que, desde fuera de las Fuerzas Armadas, se trate de politizarlas, implicándolas en la política que a cada cual conviene o utilizándolas para apoyar en uno u otro sentido sus intereses». Respecto a la adaptación a los tiempos actuales de las Reales Ordenanzas de Carlos III, actualmente en curso, el rey don Juan Carlos manifestó que era necesaria, aunque «no podrá nunca afectar a su espíritu».

Inmediatamente antes del discurso de felicitación del Rey, el ministro de Defensa, teniente general Gutiérrez Mellado, expuso ante don Juan Carlos que sobre los pilares de la disciplina, la lealtad y el compañerismo las Fuerzas Annadas han tratado de basar su esfuerzo de participación consciente en el empeño de que la sociedad española sea cada vez más justa, alegre y libre, y de que la unidad de la Patria -respetando la variedad de sus regiones- constituya la esencia del ser nacional. El ministro de Defensa, que se manifestó contrario a que las Fuerzas Armadas pierdan contacto con la realidad social, declaró que «pretendemos que nuestros Ejércitos constituyan un todo con la sociedad y sean defensores de su voluntad soberana y que, por el contrario, no sean monopolio de nadie».

Con motivo de la Pascua militar también se celebraron recepciones oficiales en las sedes de las restantes capitanías generales, con discursos de los mandos y desfiles de las tropas.

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