Los parlamentarios navarros debatirán el contencioso Navarra-Euskadi hoy en Madrid

La Asamblea de Parlamentarios vascos, reunida ayer tarde en la Diputación de Alava, acordó, por unanimidad, conceder un mandato a los parlamentarios navarros que forman parte de esta Asamblea (dos socialistas y un nacionalista) para que se reúnan con la UCD de Navarra a fin de obtener un consenso en torno al texto preautonómico vasco, dejando bien entendido que éste mantiene inalterable en todos sus extremos, si bien se acepta un desarrollo de la disposición transitoria segunda, que determina el mecanismo de incorporación de Navarra al Consejo General. Esta reunión de todos los parlamentarios navarros tendrá lugar hoy mismo en Madrid, y en el caso de que hubiera acuerdo, el tema será llevado al próximo Consejo de Ministros o se convocará de inmediato un Consejo extraordinario para aprobar el decreto-ley.

La asamblea vasca tenía ayer una papeleta verdaderamente difícil para obtener un consenso en torno a una posición que, sin rechazar la propuesta del Gobierno de negociar el tema a tres bandas -incluida UCD de Navarra-, les permitiera mantener su primitivo acuerdo de no admitir modificaciones en el decreto-ley pactado con Clavero.Precisamente en busca de este consenso fuera de los oídos de la prensa, para no ofrecer una impresión de ruptura, la asamblea se interrumpió después de que el senador Irujo resumiese brevemente la entrevista con Suárez y diese lectura a una carta posterior que le había remitido el ministro Clavero. En esta carta se hablaba de la ne cesidad de realizar esfuerzos adicionales para lograr un consenso mayoritario y, si fuera posible, la unanimidad con la participación de la UCD de Navarra, pero sin que a lo largo de toda la carta se hable en ningún caso de renegociaciones, sino de conversaciones adicionales.

La interrupción de la asamblea iba a durar inicialmente media hora, pero en realidad se prolongó hasta cerca de las dos horas. Esto da una idea de la dificultad para en contrar un punto de acuerdo entre todas las fuerzas parlamentarias. Las posiciones variaban desde el mantenimeinto a ultranza del texto con las movilizaciones como amenaza de fondo (Euskadiko Ezkerra) hasta la aceptación lisa y llana de la propuesta de Suárez para reunirse con la UCD de Navarra y renegociar el tema en presencia de Abril Martorell y Clavero (UCD). Nacionalistas y socialistas -más duros estos últimos- mantenían posiciones intermedias, propician do la celebración de una primera entrevista con los navarros al margen del Gobierno para ver si existía la posibilidad de obtener ese consenso.

Fue finalmente el diputado socialista navarro Gabriel Urralburu quien elevó a la asamblea la propuesta definitiva, que cabría resumirla en los siguientes términos: sin decir que no a la oferta del Gobierno, y dado que el consenso hay que buscarlo con la UCD de Navarra, facultar a los parlamentarios navarros que forman parte de esta asamblea para que se reúnan con la UCD de Navarra a fin de óbtener la aceptación del texto preautonórníco por parte de todos los elementos implicados. Si éste se consigue, bastará informar al Gobierno de que no hay dificultades para la promulgación del decreto-ley y sobrará esa reunión tripartita.

Un organismo foral competente

Este mandato de los navarros que forman parte de la Asamblea queda limitado en todo caso a mantener el texto, dejando abierta, la posibilidad de desarrollar la disposición transitoria segunda que hace referencia al mecanismo de incorporación de Navarra. Esta disposición transitoria pone la decisión última en manos de un denominado «organismo foral competente», que se designará en una negociación ulterior con el Gobierno, al igual que la fórmula para decidir esa incorporación. Como se ve, el texto pre-autonómico deja el terna. de Navarra totalmente abierto y esta es la razón de que el socialista Urralburu se mostrase ayer optimista.

En el caso de que los ucedistas navarros se avengan a esta fórmula, el texto preautonómico se mantendría en sus términos actuales, desarrollándose más adelante la fórmula concreta de Navarra. Esta posición fue rubricada por todos los partidos parlamentarios vascos, si bien insistieron algunos en que en ningún caso el mandato autorizaba a modificar el decreto-ley.

La unanimidad en torno a este acuerdo estuvo ligada, en parte, a conversaciones telefónicas mantenidas ayer mismo con el Ministerio para las Regiones, donde se habría obtenido alguna promesa de que, efectivamente el decreto-ley iba a seguir adelante.

Incluso las fuerzas extraparlamentarias que estuvieron representadas en la entrevista con Suárez aceptaron este encuentro con UCD de Navarra, aunque al gunos lo consideraban como una cierta derrota moral. En todo caso y aunque no se aludió a ello para nada en la asamblea, los partidos firmantes de las manifestaciones del día 4 de enero mantienen la convocatoria con la cláusula de que el llamamiento podría ser retirado si para esa fecha el Gobierno aprueba el texto preautonómico.