Finalizó la huelga del espectáculo

Con la aprobación de las propuestas de la asamblea permanente del espectáculo de Barcelona y la coordinadora de las organizaciones de actores y técnicos de teatro de Madrid finalizó ayer la huelga del espectáculo, que ha durado cuatro días, como protesta por el proceso militar y encarcelamiento de Albert Boadella, del grupo Els Joglars, y por la libertad de expresión.Los teatros de Madrid abrieron ayer por decisión de la asamblea de sus trabajadores, celebrada a mediodía en el teatro Barceló, con una votación de 189 a favor de la reincorporación al trabajo, 36 en contra y quince abstenciones. En un comunicado de la coordinadora, firmado por CCOO, UGT, Promotora del Sindicato de Trabajadores del Espectáculo y Asamblea de Teatro Independiente Profesional, ponen de manifiesto la firmeza y coherencia de la huelga, la incidencia de la misma en la opinión pública y sectores responsables del país y la evidencia de las contra dicciones jurídicas existentes en la legislación, «logros suficientes para la reincorporación al trabajo sin que esto suponga en ningún momento renunciar a proseguir la lucha por la libertad de expresión que hoy se concreta en la libertad de nuestro compañero Albert Boadella». Este comunicado no fue suscrito por la CNT, al entender que la huelga debía terminar con la excarcelación de Boadella.

Las distintas organizaciones que se han solidarizado con la huelga manifestaron en un comunicado que «la amplia respuesta y el carácter unitario de las acciones pone de manifiesto la necesidad de crear una coordinación de los distintos sectores para la mejor solución del caso Boadella, así como afrontar conjuntamente todos los problemas de los trabajadores del espectáculo».

En la asamblea celebrada en Madrid se informó de la reunión de la coordinadora con el ministro de Cultura, Pío Cabanillas, quien reconoció la lección de serenidad y firmeza del sector del espectáculo, así como las contradicciones del pacto de la Moncloa.

En las funciones de teatro se difunde un texto de la asamblea general permanente de los trabajadores del espectáculo, de los medios de comunicación y de la cultura, donde explican su lucha por la libertad de expresión y que con sus acciones contribuyen a la creación de una sociedad democrática, donde todo el mundo sea respetado.