Representantes de UCD se entrevistan con el presidente del Senado francés

, Con una visita al presidente del Senado francés, Alain Poher, terminó ayer su estancia en París la delegación de la Unión de Centro Democrático (UCD) que, durante dos días, con el fin de darse a conocer, ha tomado contactos con todas las grandes formaciones políticas francesas, exceptuando el Partido Comunista. Un almuerzo ofrecido a la delegación por el embajador de España, marqués de Nerva, dio lugar a un incidente como consecuencia de la selección que operó este último para asistir al acto, entre los periodistas españoles acreditados en París.La delegación de siete personas de la UCD, encabezada por el vicepresidente del Senado Juan Carlos Guerra Zunzunegui y Javier Rupérez, mantuvieron conversaciones con los líderes y comités ejecutivos de los partidos de la mayoría gobernante: con Jacques Chirac, presidente del RPR gaullista, con Jean Pierre Soisson, líder del Partido Republicano (PR), de inspiración giscardiana, con el líder de los centristas, Jean1ecanuet y, de manera informal, celebraron una cena con el dirigente nacional del Partido Socialista, Antoine Blanca; también fueron recibidos por el secretario general de la Presidencia de la República, François Poncet. El señor Soisson, secretario general del PR giscardiano y centrista, al final de una reunión de trabajo, ayer, subrayó la similitud ideológica de los dos partidos.

En todas estas conversaciones se abordó el problema de la entrada de España en el Mercado Común. La delegación de la (UCD) se entrevistó con representantes de las asociaciones de emigrantes para conocer sus problemas y con vistas a interesarse más de cerca los representantes de UCD, revelaron que su cena con los socialistas se la había, facilitado el encargado de relaciones exteriores del PSOE, Luis Yáñez, y que, en lo sucesivo, efectuarán un viaje mensual por el resto de Europa para afirmar el conocimiento y la consolidación de su partido.

Anteayer, el embajador español, marqués de Nerva, invitó a los delegados a un almuerzo en la embajada, al que asistieron algunos periodistas relevantes parisienses (Andre Fontaine, de Le Monde, y el señor, Chevrillon, director de Le Point, entre otros), y al que sólo fueron invitados cuatro corresponsales de la prensa española. Los periodistas acreditados en París reaccionaron vivamente por desconocer los criterios que les habían privado de una fuente de información que, en teoría, representa al Estado español.

El señor Guerra Zunzunegui, en nombre de la delegación de UCD, se desentendió totalmente «de la organización del almuerzo de la embajada y, naturalmente, comprendo que ustedes se sientan injustamente discriminados», les declaró a los informadores españoles.