Debate en Alemania sobre la objeción de conciencia al servicio militar

La discusión sobre la objeción de conciencia, garantizada por una ley del pasado 13 de julio en la República Federal de Alemania y remitida ahora al Tribunal de Garantías Constitucionales por la Democracia Cristiana, ha alcanzado de lleno a una fibra sensible del país: el militarismo. Según el propósito de los conservadores alemanes, el tribunal debería decidir en qué medida basta la «prueba de conciencia» para liberar a la juventud masculina alemana del servicio de las armas.El tribunal decidirá en marzo, tras el examen de las exposiciones de las partes interesadas -social-liberales, por un lado, y democristianos, por otro- si la liberalidad del Gobierno en materia de servicio militar se ajusta o no a la Constitución. De lo que no parece haber duda es de que se impondrá la obligatoriedad de residencia en un cuartel a todos los objetores de conciencia, con lo que se facilitaría la aplicación de una de las peticiones de la Democracia Cristiana: la comprobación de si la negativa a hacer el servicio militar obedece efectivamente a una postura ética.

Aporte problemas posteriores derivados de esta circunstancia, como el control militar sobre las conciencias de los objetores, se plantea el no menos conflictivo sobre la legitimidad del discernimiento «constitucional» de las convicciones de los objetores. Un comité de abogados ha anticipado que la obligatoriedad del servicio en armas ni siquiera está establecido por las leyes fundamentales:

La Democracia Cristiana insiste, por su lado, en que las obligaciones militares contraídas por la RFA con la OTAN, sobre todo en lo relativo al número de soldados alemanes en los ejércitos aliados, quedarían mermadas con la aceptación de la cláusula de conciencia.