Un muerto y tres heridos en un atraco a una caja de ahorros de Barcelona

Un atracador muerto y tres personas heridas de diversa consideración -un policía armado y dos paisanos- es el resultado del tiroteo sostenido en la mañana de ayer entre la policía y los asaltantes de una sucursal de la Caja de Ahorros Provincial de Barcelona.

Sobre las nueve de la mañana, tres individuos armados con pistolas irrumpieron en la sucursal de la calle de Cerdeña de la citada entidad de ahorro, amenazando con sus armas al director y a tres empleados, dos clientes y un reparador mecánico de calefacción que se encontraban en aquellos momentos; en el interior del establecimiento. Uno de los atracadores se dirigió directamente al cajero y le exigió la entrega del dinero que había depositado en caja, unas 600.000 pesetas, obligando al resto del personal a que se tumbara en el suelo. Con el dinero en su poder, los atracadores sé llevaron al personal hacia la calle, siempre bajo aamenaza de sus armas. Cuando el primer atracador irrumpió en la acera de la calle, llevando delante a un empleado como rehén, hizo acto de presencia un coche patrulla de la Policía Armada, al parecer alerta do por transeúntes que habían observado la escena desde el exterior de la entidad de ahorro. El atracador realizó varios disparos hacia las fuerzas de la policía, hiriendo de gravedad al policía armado Luis Ovejero Talabán. Al relpeler la agresión la policía, se entabló un intenso tiroteo, cayendo muerto uno de los atracadores y resultando heridos dos clientes: José Castro Rodríguez, de treinta años, y María Leonor Soilan Calvo, de 37, el primero de ellos de carácter grave.

En la confusión originada por el tiroteo, uno de los atracadores consiguió huir a bordo de un Citroén GS Palas, matrícula B-9296-BL, que previamente habían estacionado los asaltantes cerca de la puerta de entrada del edificio bancario. La policía no hizo fuego sobre el vehículo, debido al intenso tráfico que había en aquellos momentos en el lugar de los hechos. El tercero de los atracadores optó por retroceder al interior del establecimiento, manteniendo como rehenes a uno de los empleados y al mecánico del sistema de calefacción. Mientras, el director de la caja de ahorros logró encerrarse en su despacho y accionar la alarma, conectada directamente con la jefatura Superior de Policía. A partir de entonces, la Jefatura Superior de Policía estableció contacto telefónico ininterrumpido con el atracador, a fin de convencerlo para que dejase el arma Y saliese del establecimiento con los brazos en alto. Fuera, en la calle, la fuerza pública montó un espectacular despliegue, desplazándos al lugar el jefe superior de Policía, José María Calleja, y el inspector regional de personal y servicios, para dirigir personalmente las operaciones, tomando todas las medidas necesarias, con el fin de salvaguardar la vida de los rehenes y asegurar la captura del malhechor. La tensa situación se prolongó por espacio de una hora.

En una de las conversaciones telefónicas, y mientras el atracador mantenía su atención en el teléfono, el mecánico se abalanzó sobre él, arrebatándole la pistola y siendo reducido Inmediatamente por la policía. El atracador detenido fue posteriormente identificado como Francisco Ortiz Sánchez, de dieciocho años de edad. La pistola utilizada por este asaltante es una «Star», calibre 7,65 milímetros, y la del atracador muerto una «Vesta», igualmente del calibre 7,65. La policía recuperó la totalidad del dinero.

Según la Jefatura Superior de Policía, tanto el atracador detenido ,como el que resultó muerto en el tiroteo son delincuentes comunes y podrían estar relacionados con otros atracos habidos en Barcelona últimamente.