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La terrorista Ingrid Schubert se ahorcó "bajo una fuerte depresión síquica"

El abogado de la militante de la banda Baader-Meinhof, Ingrid Schubert, confirmó ayer que su defendida apareció ahorcada en su celda de la prisión de Stammheim, en Munich. Al parecer la muerte se produjo a las siete de la tarde del sábado. Ingrid murió por presión de una cuerda elaborada con tiras de la ropa de su cama.

El abogado Bemdler ha confirmado, a su vez, aunque indirectamente, la tesis del «suicidio material», al igual que ocurrió en los casos de Baader, Ensslin, Raspe y Moeller. Bendler, que se entrevistó con Ingrid Schubert, por última vez, dos días antes de la muerte de ésta, pidió que «considerando la grave depresión síquica que padecía su defendida por el aislamiento, debería trasladársela con urgencia ala cárcel de mujeres de Francfort».

La detenida era considerada militante de primera hora en la organización «Fracción del Ejército Rojo». Ingrid tomó parte en el comando que, en mayo de 1970, liberó a Andreas Baader, cuando se encontraba en prisión preventiva. En procesos celebrados en 1971 y 1974 se la condenó trece años de cárcel por «intento de asesinato, asalto a bancos, participación en una organización criminal».

El verano pasado fue transferida de la cárcel de Stammheim en Stuttgart, a la de Stadelheim en Munich, durante una huelga de hambre. La policía adujo como razón para este traslado el que en Stammheim no había medios suficientes para aplicar a la detenida una alimentación por vía intravenosa. En su celda de Stuttgart, vacía desde entonces se encontraron el viernes cuatro cientos gramos de dinamita.

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