Los comunes amenazan con matar a los fascistas detenidos en Barcelona

Alguno de los fascistas detenidos recientemente en Barcelona fue puesto anteanoche en libertad sin que se pueda precisar si los liberados son uno o dos. Los restantes continúan en la cárcel Modelo de Barcelona, donde la presencia del grupo de fascistas catalanes ha creado una fuerte tensión, por cuanto que numerosos detenidos por delitos comunes han expresado formalmente su deseo de «lincharles».Sólo tres de los detenidos se encuentran actualmente en situación de incomunicación, decretada por la autoridad judicial. Entre los incomunicados se encontraría uno de los hermanos Pinilla y José Manuel Macias. Este último fue visitado ayer por la brigada especial de información de la Guardia Civil, que le interrogó durante largo rato. Al parecer, Macías era conocido por los servicios que le interrogaron, pese, a que la Guardia Civil no intervino en su detención.

Una de las grandes incógnitas sujeta a todo tipo.de especulaciones es saber si los dos primeros detenidos -Macías y Carmona- habían sido ya detenidos con anterioridad al arresto que les condujo a la cárcel. Algunas fuentes señalaron que podían haber sido retenidos o interrogados pocas horas antes de su detención, pero este extremo no ha podido ser confirmado.

Los detenidos que no están incomunicados -entre los que se encontraría Miguel Gómez Benet, el principal de los detenidos- deben salir de sus celdas cuando los demás presos se encuentran en los talleres de la prisión o bien encerrados en sus celdas, ya que numerosos presos comunes, han expresado la intención de matarlos.

Algunos de los presos comunes llegaron a intimidar a un funcionario para que les entregara las llaves de las celdas de los fascistas, con la finalidad de entrar en ellas y matarles.

Rueda de prensa con Alberto Róyuela

Tres periodistas y un fotógrafo barceloneses mantuvieron anoche ,una entrevista con Alberto Royuela, contra el que hay una orden de búsqueda de la policía barcelonesa por estar presuntamente implicado en el atentado contra El Papus.

En dicha entrevista, Royuela declaró que pensaba entregarse a la policía en dos o tres días, «dado que mi tía, que es la mujer que me ha criado y que ha hecho de madre para mí toda la vida, se encuentra gravisima. Me presentaré cuando la entierre», dijo. Aseguró, asimismo, mantener relaciones superficiales con los detenidos en Barcelona (exceptó con Agustí, del que dijo que era su secretario) y desconocer a los detenidos en Lérida (entre ellos a Gómez Benet). Dijo también que se encuentra tranquilo y que espera que al final todo se aclare, al tiempo que condenó el atentado contra El Papus. Añadió que hacía tiempo que no tenía ningún contacto con italianos ni con militares, afirmando desconocer al coronel Martín de Pozuelo.

Posteriormente, los tres periodistas, por decisión propia, prestaron declaración sobre el tema ante el juzgado de guardia de Barcelona.