Nueva versión sobre el descubrimiento de un túnel en la prisión de Córdoba

Un portavoz de los representantes de los funcionarios del cuerpo de prisiones informa a EL PAIS que la versión hecha pública por la dirección del centro de cumplimiento penitenciario de Córdoba, sobre el descubrimiento de un túnel por el que se preparaba una fuga, en cuya versión ese descubrimiento aparecía como una investigación llevada a cabo por algún funcionario en coincidencia con un proceso interpretativo de ciertos signos por el señor director, no es exacta y pretende aureolar la actividad de dicho señor y con ello consolidar su posición a la vista de que su destitución ha sido exigida ante las autoridades de la Dirección General por reclusos y funcionarios.

Según la citada fuente, el descubrimiento de dicho túnel no es de ninguna forma el resultado de unas dotes deductivas ni de un plan detectivesco. Simplemente es la consecuencia de la delación de un recluso que hizo a un funcionario una confidencia, sin duda en procura de una nota meritoria en su expediente. Lo que sí es cierto, dicen, es que pudo ser descubierto con anterioridad si la situación interna de la prisión fuera normal.

Los funcionarios manifiestan que siguen manteniendo sus reivindicaciones a través de la coordinadora nacional sobre el cobro de los atrasos que tienen devengados de la última subida de su coeficiente, y que suponen unas 70.000 pesetas por cada uno; insisten en las reivindicaciones internas de aquella prisión sobre una falta de garantía a su integridad, lo que les ha hecho prestar voluntaria y colectivamente servicio a la totalidad de la plantilla durante cinco días. Otras reivindicaciones pendientes en las que insisten son: falta de mobiliario, incluso de camas para los funcionarios libres de turno, mesas, aseos, duchas y servicios.

La situación en el interior de la prisión es de total normalización y los reclusos han desistido de su actitud de huelga de hambre.